Cristina Fernández y 22 senadores argentinos juran cargos (Video)

Entre cánticos, pancartas y gritos de apoyo de cientos de militantes kirchneristas, la exmandataria volvió este miércoles acompañada por los diputados electos de su formación -Unidad Ciudadana.

Video: EFE

Por: Buenos Aires / EFE - Miércoles 29 de noviembre de 2017 03:45 PM

La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) y otros 22 senadores que fueron elegidos en las elecciones legislativas de octubre en Argentina juraron hoy sus cargos en una ceremonia en la Cámara Alta, once días antes de que arranque su mandato oficialmente.

Entre cánticos, pancartas y gritos de apoyo de cientos de militantes kirchneristas, la exmandataria ingresó esta mañana al recinto en el que ganó relevancia como figura política, primero entre 1995 y 1997 y después entre 2001 y 2007, justo antes de llegar a la Presidencia.
Diez años después, volvió este miércoles acompañada por los diputados electos de su formación -Unidad Ciudadana- Vanesa Siley, Fernando Espinoza, Roberto Salvarezza y Fernanda Vallejos, quienes se sumaron a los aplausos y vítores que le dedicaron varias personas desde los palcos cuando prestó juramento.
Fue la segunda en hacerlo, justo por detrás de su rival en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, y con quien protagonizó la principal batalla de los comicios del 22 de octubre, el oficialista Esteban Bullrich.
Un conflicto que finalmente se saldó con la victoria de este sobre Fernández con cuatro puntos porcentuales más.
En declaraciones a la prensa tras concluir la ceremonia, Bullrich afirmó que espera que la convivencia con Fernández sea "muy buena" para poder defender "juntos" a los bonaerenses y contribuir a que los argentinos "vivan cada vez mejor".
Asimismo, reveló que se felicitaron mutuamente tras prestar juramento y señaló que no hay "ninguna razón" para que la exmandataria no asuma su banca, pese a las causas judiciales en las que está implicada y ante las que gozará de inmunidad parlamentaria a partir de ahora.

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La sesión estuvo presidida por la vicepresidenta y titular del Senado, Gabriela Michetti, quien fue la encargada de preguntar a cada nuevo legislador si juraba a la patria, por "Dios" y los "santos evangelios" desempeñar debidamente su cargo.
"En estos momentos de jura y donde uno se esta comprometiendo ante dios y, en todos los casos, ante la patria, creo que requiere cierta solemnidad lo que hacemos y me parece que eso estuvo en la ceremonia", valoró Michetti en declaraciones a los medios.
"Ojalá que, después, todo esto que uno se compromete a hacer ahí pueda ser correspondiente con las acciones que todos los días uno va desarrollando. Les pedimos a los senadores y senadoras que recién han jurado que traten de ser coherentes con ese juramento", aseveró.
Consultada por si cree que Fernández, conocida por su carácter combativo, mantendrá esa actitud, afirmó que todo dependerá de que tanto ella como el resto de senadores sean fieles a "ese espíritu".
"El Senado tiene una lógica y una cultura de trabajo muy tranquila, muy serena. En el Senado no se aplaude, en el Senado no se grita, no se hacen cuestiones de tipo rimbombante", aseguró.
Fernández no fue la única exmandataria que estuvo presente este miércoles en al Cámara Alta: también prestaron juramento los expresidentes Adolfo Rodríguez Saá, senador por la provincia de San Luis (centro), y Carlos Menem, que renueva su banca como representante por la provincia de La Rioja (noroeste).
En la que fue una sesión especial, juraron 23 de los 24 senadores electos por las provincias de Buenos Aires, Misiones, Formosa, Jujuy, La Rioja, San Juan, San Luis y Santa Cruz.
La única que estuvo ausente fue la oficialista Gladys González, elegida senadora por Buenos Aires, que se encuentra de viaje en China, por lo que jurará en una próxima sesión.
Minutos después de culminar la ceremonia, una amenaza de bomba anónima obligó a registrar la sede del Congreso con perros de la brigada antiexplosivos de la Policía Federal.
Según informaron a Efe fuentes parlamentarias, no fue necesario ordenar la evacuación del Parlamento, ya que, después de revisar todos los salones, se comprobó que había sido una falsa alarma.