Crean conciencia con el sexto Festival de Tortugas Marinas

El desove o anidación de las tortugas marinas es uno de los espectáculos más impresionantes de la naturaleza, así lo afirmó Nilena Marín, integrante de la Fundación Tortuguías. El fin de semana, Tortuguías fue invitado por la Fundación Yauk Galu de Armilia, Guna Yala, para participar del Sexto Festival de Tortugas Marinas, con el fin de crear conciencia sobre la preservación y conservación de estas especies, las cuales están en peligro de extinción. En dicho festival se realizó concurso de murales, observación de tortugas baulas, concurso de dibujos en la arena, entre otros actos culturales. Marín manifestó que una de las grandes atracciones de la actividad fue ver el desove de una gigante tortuga baula con un peso de 800 libras. Durante este proceso, el reptil no debe ser molestado, ya que está en trance. La hembra sale del agua para poner sus huevos en la arena, allí los deja por un periodo de dos meses, mientras ella retorna lentamente al mar. Marín asegura que una tortuga puede poner de 80 a 100 huevos, pero de ellos, solo un 80% o 90% nacen de manera satisfactoria. Al momento del nacimiento de las tortuguitas, ellas luchan para entrar a su hábitat. Después de escapar de los primeros depredadores en la playa. De mil huevos de tortugas marinas, solo una llega a su edad adulta. La edad de reproducirse oscila entre los 15 a 25 años. En el mundo existen siete especies de tortugas marinas, y en nuestro país anidan cinco: tortuga verde, la baula, caguama, golfina o lora y carey. De igual forma, Panamá cuenta con 100 playas de anidación, tanto en el Caribe como en el Pacífico. Recomendaciones Es recomendable que al momento de ver a uno de estos animales, esté acompañado por un guía o un biólogo para que le dé las instrucciones pertinentes. No puede molestarlas durante el proceso de desove, ya que se encuentran en trance. No le tome fotos con “flash” ni coloque luces amarillas cerca de las tortugas, esto las desorienta; debe ser una luz roja. No realice fogatas en las playas, pues el nido podría estar en peligro. Deposite la basura en los respectivos lugares y evite la contaminación. Recuerde ser conservacionista, no un depredador.