Italia estudia convertir centros deportivos en burbujas anticoronavirus
Dos semanas de "clausura" para los futbolistas en unos centros deportivos blindados, sin ningún tipo de contacto con el exterior, es la hipótesis que baraja Italia para mantener a los futbolistas de la Serie A a salvo de eventuales contagios por coronavirus y poner cuesta abajo el camino hacia la reanudación del campeonato.
La prioridad es clara. El fútbol podrá regresar en Italia solo en condiciones de máxima seguridad y el Gobierno italiano baraja en estas horas la posibilidad de tomar medidas extremas para garantizar que los futbolistas puedan ejercer su profesión con serenidad y riesgo mínimo.
Así, ante la presión de la Federación de Fútbol Italiana (FIGC) para terminar la temporada 2019-2020 de la Serie A, la subsecretaria de Sanidad, Sandra Zampa, informó de una línea a seguir que, potencialmente, puede crear las condiciones para que vuelva la competición.
"La solución que imaginamos es una concentración blindada de los equipos. Hay que tener en cuenta otro elemento, o sea que sabremos en quince días los efectos de la reapertura empezada este lunes. ¿La epidemia estará bajo control? Si es así, se pueden abrir más cosas, fútbol incluido", dijo Zampa en una reciente entrevista.
"Se abren las puertas de un centro deportivo, entran todos los que dieron negativo en el tampón, se entrenan en equipo y después de quince días los datos nos dirán si se puede dar un paso más. De esta forma se puede pensar volver a jugar. Hay que garantizar la salud de todos. Los jugadores deben entrar siendo negativos y deben seguir negativos durante la concentración", concluyó.
Italia empezó el último lunes la denominada "Fase 2", la de convivencia con el coronavirus, y el Gobierno dio el visto bueno a la reanudación de los entrenamientos futbolísticos, de forma individual, en los centros deportivos.
Muchos clubes de la Serie A sometieron en los últimos días a sus jugadores a unos tampones faríngeos para comprobar que no estén contagiados por el coronavirus antes de darles el visto bueno para ejercitarse.
Sin embargo, para pensar seriamente en una reanudación de la Serie A, los clubes necesitan entrenarse en grupo a las órdenes de sus entrenadores y trasladaron esta voluntad al Gobierno en un encuentro celebrado el último jueves.
Tras analizar el protocolo presentado por la FIGC, el Gobierno prometió seguir estudiando posibles soluciones, destacando sin embargo que es imposible prever en este momento cómo evolucionará la pandemia en los próximos quince o veinte días.
La idea adelantada por la subsecretaria de Sanidad de blindar a los jugadores durante dos semanas en los centros deportivos para que puedan entrenar en grupo representaría la llave para pensar en el regreso de la competición.
"Se va hacia una solución y es la que los aficionados desean. Todavía no hay el visto bueno, pero vamos por el buen camino", reconoció Zampa.