La comunidad Davis, en Colón, espera que se haga justicia
Las reacciones de los residentes de la comunidad José Dominador Bazán, sobre la entrega voluntaria de Jonhatan Wilson Bailey, supuesto homicida del sacerdote Aníbal Gómez,
Las reacciones de los residentes de la comunidad José Dominador Bazán, sobre la entrega voluntaria de Jonhatan Wilson Bailey, supuesto homicida del sacerdote Aníbal Gómez, no se hicieron esperar.
El hasta ayer, martes, prófugo de la justicia, fue entregado por su abogado Aureliano Arango y su familia, que le ofreció el apoyo.
Algunos familiares de ese hombre se congregan en la iglesia evangélica y le habían solicitado que se entregara.
En sus primeras declaraciones, el sospechoso principal dijo que no mató al sacerdote Aníbal; solo lo golpeó y este quedó con vida (cuando se fue). Aseguró que no es asesino, como lo llaman.
Rafael Julio, residente del área y quien estuvo cerca al padre Aníbal, haciendo los trabajos de plomería, carpintería y electricidad en la casa y la iglesia, dijo que “por lo menos tuvo el valor y la conciencia de entregarse”.
Dijo que ese hombre empezará a arreglar su problema con la sociedad, y ya queda por parte de las autoridades resolver ese caso.
Según Julio, nunca vio a ese hombre.
Dijo que ya la justicia Divina se hizo; falta la del hombre.
El vecino de la comunidad José Dominador Bazán dijo que jamás pensó que la doméstica María podía estar involucrada, porque recuerda cuando lo operaron, y era precisamente el sacerdote Aníbal quien la ayudó a cuidarse.
“Me siento satisfecha que el asesino del padre se haya entregado, pero lo que quisiera es que se aclare bien la situación”, dijo Cecilia Pérez, cercana colaboradora en la Iglesia de Davis.
Dijo que estarán pendientes porque quieren que eso se aclare, porque el padre Aníbal era muy querido en la comunidad.
La comunidad colonense espera respuestas de las autoridades, que en muchos casos investigan mucho, pero nunca se conoce si resolvieron algún caso.