Sicarios atacan a abogado

Fue acechado por los sicarios



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El hombre recibió alrededor de cuatro balazos, según las investigaciones preliminarios. No hay sospechosos, pero se siguen algunas pistas y se busca determinar si tiene relación con la ola violenta en la comunidad Los Andes, del distrito San Miguelito.

El funcionario del MIDA y abogado Gaspar Octavio Díaz, de 47 años, se encuentra entre la vida y la muerte al recibir cuatro balazos, entre ellos, uno en la cabeza, tras ser atacado por dos sicarios que viajaban en una motocicleta de color amarillo.

El ataque se perpetró la tarde de ayer en la salida de las instalaciones del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Mida), en el sector de Llanos de Curundú, corregimiento de Ancón.

El herido, quien ejerce funciones en el Departamento de Asesoría Legal del MIDA, y además fue administrador del complejo deportivo de Los Andes N.° 2, iba al volante del vehículo Toyota Yaris de color gris, con placa 472580, junto con una pasajera.

Al arrancar el sedán y tras recorrer varios metros, el auto fue interceptado por los atacantes, que viajaban en una motocicleta amarilla, quienes apuntaron hacia el lado del conductor y apretaron el gatillo sin mediar palabras.

Al parecer, era esperado sigilosamente por sus verdugos al momento de su salida.

Tras las detonaciones, el conductor perdió el control y se fue frontalmente contra un árbol. La segunda persona que iba con él, salió ilesa del atentado.

Los compañeros de labores se acercaron y solamente pudieron ver a los atacantes acelerar la moto y darse a la fuga.

En minutos se acercó un patrulla de la Policía Nacional, donde trasladaron al herido al Cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás.

Mientras eso, la pasajera se desmayaba ante la escena.

Díaz fue llevado a la sala de trauma. Ahí se informó que el paciente presenta un disparo en la cabeza, uno en el pecho, uno en el hombro y la mano izquierda.

Los efectivos policiales realizaron un fuerte operativo, sin embargo no se reportaron detenciones.

Los funcionarios del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses pudieron contabilizar cinco casquillos de calibre 9 milímetros. El auto mantenía tres orificios de bala.

El caso se encuentra en manos de la Unidad de Homicidios de la Fiscalía Auxiliar de la República, que busca establecer el móvil del atentado.