La magia del comino
El comino era considerado por los egipcios como una de las cuatro semillas fogosas o excitantes (las otras son el anís, el hinojo y el cilantro) y,
/El comino era considerado por los egipcios como una de las cuatro semillas fogosas o excitantes (las otras son el anís, el hinojo y el cilantro) y, por ello, apreciaban tanto esta hierba que la tomaban como afrodisíaco y también la ponían como ofrenda en las tumbas de los faraones.
En la actualidad, con su semilla se realizan hechizos encaminados a evitar el robo, ya que se considera que tiene el “don de retención”, lo que impide que sea hurtado cualquier objeto que lo contenga.
El comino se quema con incienso para obtener protección, y se esparce por el suelo, a veces con sal, para alejar el mal. Incluso, antiguamente, en Alemania se acostumbraba llevar atado al cuello una pequeña bolsa llena de comino para defenderse de las brujas y de los malos espíritus. Todavía hay regiones donde las novias llevan comino para apartar de la boda las fuerzas negativas.
Se emplea en los hechizos de amor, y cuando se entrega a un amante, molido o en semillas dentro de un saco mágico, fomentará la fidelidad.