Buscará imponer su experiencia
Uno de los pleitos más llamativos del Festival Nocaut a las Drogas de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), del próximo sábado 12 de marzo en la arena Roberto Durán de la ciudad de Panamá será el que protagonizarán el panameño Jezreel ‘El Invisible’ Corrales y el mexicano Miguel ‘El Explosivo’ Madueño.
El combate de la cartilla, organizada por la empresa Laguna Premium Boxing, está pactado a 12 asaltos, será eliminatorio de título mundial del peso ligero en la AMB, donde el supercampeón es el australiano George Kambosos Jr., mientras que el monarca regular es el estadounidense Gervonta Davis.
‘El Invisible’ Corrales, de 30 años y récord profesional de 25 triunfos, cuatro derrotas y 10 nocauts, será el boxeador de la experiencia en este combate. Ya el púgil panameño sabe lo que es estar en la cima cuando conquistó el supercampeonato mundial superpluma de la AMB el 27 de abril de 2016 al noquear a los 2 minutos 59 segundos del segundo asalto al japonés Takashi Uchiyama, luego de enviarlo en tres ocaciones a la lona. El 31 de diciembre de ese mismo año se concreta la revancha en Japón y nuevamente el panameño sacó la casta para llevarse un triunfo por decisión dividida.
Corrales realizó una defensa más del cetro de supercampeón mundial, venciendo al mexicano Robinson Castellanos el 15 de julio de 2017.
No obstante, pierde el supercampeonato de una forma inesperada, al no cumplir con el peso para su pleito ante el boricua Alberto Machado, quien también lo venció en el ring el 21 de octubre por nocaut en Verona, Nueva York, Estados Unidos.
Por su parte, Madueño será el púgil de la juventud cuando se presente al pleito con 23 años y récord profesional de 27-0, con 25 nocauts.
Originario de Guasave, Sinaloa, México, pero residente en Orange, California, Estados Unidos, ha realizado la mayor parte de sus combates en su natal país, pero de sus últimos cinco pleitos,cuatro han sido en Estados Unidos.
El púgil azteca es actualmente el clasificado mundial N.°11 del peso ligero de la AMB y tiene un alto porcentaje de nocaut (92.59), por lo que el panameño tendrá que poner en práctica toda su agilidad para no ser conectado con contundencia.