Agilizan la identificación de las víctimas del fuego
Las autoridades convocaron a un laboratorio ambulante de ADN y antropólogos para identificar a los muertos a medida que continuaba la búsqueda de víctimas del incendio forestal más destructivo que haya conocido California.
La cifra de víctimas en ambos extremos del estado llegó a 25 y se consideraba probable que aumente.
El incendio más grave era el del norte, donde las llamas redujeron a la población de Paradise, de 27,000 habitantes, a escombros y se extendían a poblaciones vecinas. Ese incendio dejó al menos 23 víctimas.
El comisario del condado de Butte, Kory Honea, dijo que se había convocado a más rescatistas y consultado con antropólogos de la Universidad Estatal de California en Chico porque en algunos casos “los restos que encontramos son huesos o fragmentos de huesos”.
Las autoridades pidieron a la gente con familiares desaparecidos que den muestras de ADN para ayudar a la identificación. Las llamas destruyeron más de 6,700 inmuebles, hogares en su casi totalidad.
La comisaría elaboró una lista de 110 personas con paradero desconocido. Las autoridades expresaron la esperanza de que muchas estuvieran a salvo, pero sin poder comunicarse con sus seres queridos.
Los bomberos ganaron un poco de terreno durante la noche contra el incendio, que se extendió levemente a 440 kilómetros cuadrados con respecto al día anterior, pero fue contenido en un 25% comparado con el 20% en la víspera, según la agencia de bomberos Cal Fire.