El pontífice rezó públicamente ante una estatua de la Virgen María en la Plaza de España, de acuerdo con una tradición papal que se cumple el 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción en el que se recuerda a la madre de Jesús.
Roma APEl papa Francisco oró el domingo en el centro del distrito comercial más elegante de Roma, donde pidió que jamás se olvide a los pobres. El pontífice rezó públicamente ante una estatua de la Virgen María en la Plaza de España, de acuerdo con una tradición papal que se cumple el 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción en el que se recuerda a la madre de Jesús.
Esta jornada también marca el inicio oficial de la temporada de compras de Navidad en Roma.
El recorrido de Francisco desde el Vaticano lo llevó por la Vía Condotti, llena de tiendas de diseñadores de lujo.El pontífice pidió en voz alta que las personas ``jamás sean indiferentes ante los gritos de los pobres''. Debido al frío, Francisco llevaba puesto un abrigo largo blanco mientras saludaba en la plaza a creyentes discapacitados, niños y otros entre las miles de personas que hicieron una pausa en su jornada de compras de regalos y visitas a escaparates.
En un cambio con relación a otros papas, que solían viajar en el asiento trasero, Francisco se acomodó en la parte delantera.Ahí el pontífice conversaba con su conductor mientras se trasladaba por la ciudad.
Después de una breve escala para rezar en la Basílica de Santa María la Mayor, Francisco regresó a la Ciudad del Vaticano.