En un primer momento, los guardias de la cárcel de mediana seguridad trataron de controlar la conflagración pero, al no conseguirlo, tuvieron que llamar a los bomberos, que lograron hacerlo a las 04:20 hora local (09:20 GMT).
En el trance los heridos, la mayoría de ellos, intoxicados por el humo, fueron trasladados a otra área del centro penitenciario.El portavoz de Seguridad del estado de Nuevo León, Jorge Domene, explicó a la prensa que al parecer los reos que estaban recluidos en el área de psiquiatría se encontraban allí debido al hacinamiento que hay en el penal, lo que motivó que esta fuera habilitada como dormitorio.Posteriormente, en una rueda de prensa, detalló que en la zona afectada por las llamas y el humo había 59 internos en el momento del incendio.
"Todos los reos que murieron estaban recluidos por delitos relacionados con la delincuencia organizada", indicó el funcionario, quien confirmó que el reclusorio tenía "un 20% de sobrecupo".En relación con el caso se están investigando más detalles sobre la causa del fuego, para lo cual están testificando algunos de los heridos ante la Agencia Estatal de Investigación (AEI) de Nuevo León.
En el exterior de la cárcel fueron desplegados policías y militares destacados en Apodaca y en la zona metropolitana de Monterrey para resguardar la prisión.