Asociación de fumadores piden prohijar anteproyecto 209 sobre tabaco calentado
Mencionan que las autoridades sanitarias más importantes a nivel mundial, como la FDA de Estados Unidos, el Ministerio de Salud del Reino Unido, el Gobierno de Nueva Zelanda, el Gobierno del Uruguay, el Gobierno de Grecia alineadas con la mencionada evidencia científica han decidido respaldar estas alternativas electrónicas como herramientas de salud pública
La Asociación de Fumadores y Familiares por un Panamá Libre de Humo, en representación de los más de 200 mil fumadores que habitan en el país, expresan su molestia luego que fuera exluido de la agenda de comisión de salud, el anteproyecto de Ley 209-2020 que regula la comercialización de cigarrillos electrónicos, vaporizadores y productos de tabaco calentado.
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Recalcan que el 14 de abril de este año debía darse el prohijado, sin embargo, para su sorpresa el mismo fue sacado, esto a pesar de haber estado presente en la invitación y formar parte de los expedientes que ese día estaban en la mesa de los comisionados.
La asociación mediante una carta publicada, detallan que el Ministerio de Salud mantiene una prohibición desfasada sobre estos productos, a pesar de existir cientos de estudios científicos independientes que respaldan estas alternativas como herramientas para la reducción del daño que producen los cigarrillos combustibles.
Mencionan que las autoridades sanitarias más importantes a nivel mundial, como la FDA de Estados Unidos, el Ministerio de Salud del Reino Unido, el Gobierno de Nueva Zelanda, el Gobierno del Uruguay, el Gobierno de Grecia alineadas con la mencionada evidencia científica han decidido respaldar estas alternativas electrónicas como herramientas de salud pública para reducir de forma importante el nivel de riesgo y por lo tanto mitigar las enfermedades producidas por el cigarrillo de combustión.
Advierten que si este anteproyecto de ley no es prohijado y subsiguientemente aprobado en los debates legislativos perderán mucho las personas que pertenecen a este gremio, entre otras personas.
En la lista incluyen a los más de 200 mil fumadores, que perderán el derecho a adquirir una categoría de productos que la evidencia científica a nivel global ha demostrado que son hasta un 95% menos perjudiciales que los cigarrillos de combustión.
Los vapeadores que son aquellos que ya han encontrado en los cigarrillos electrónicos una herramienta para dejar de fumar perderán al quedar expuestos a seguir adquiriendo estos productos en el mercado negro sin ninguna clase de control sanitario que garantice sus estándares de calidad.
Los familiares de los Fumadores que cohabitan con fumadores y están expuestos irremediablemente al humo de segunda mano continuarán estando expuestos a los riesgos que produce sobre ellos el cigarrillo de combustión.
De la misma manera resaltan la inclusión de la salud pública en general, porque perderán la oportunidad de reducir enormemente las enfermedades producidas por el humo del cigarrillo.
El Estado en general perderá la oportunidad de cobrar impuestos sobre esos productos electrónicos que hoy día, debido a la prohibición, evaden la contribución fiscal. Estos productos electrónicos, al estar prohibidos, son comercializados ampliamente en el mercado negro sin pagar impuestos a la Dirección General de Ingresos.
Y por último incluyen la seguridad pública, porque si el anteproyecto 209 no es prohijado y aprobado, el contrabando de los cigarrillos que es controlado en un 80% por el crimen organizado seguirá funcionado y utilizarán sus ingresos ilícitos para financiar actividadesilícitas de otra índole.
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