Fernando "Nando" Tom G.: Notable atleta y dirigente
En su época de gloria en el baloncesto, desde Colón hasta Panamá, se destacó por su estatura de 6 pies 6 pulgadas, su gran capacidad como reboteador y su aguerrido desempeño debajo del aro
A Fernando "Nando" Tom Gutiérrez se le puede describir de diferentes maneras: estrella del baloncesto nacional e internacional, notable dirigente del béisbol y baloncesto, y experto en finanzas, auditorías y alta gerencia de bancos y entidades. A la edad de 99 años, falleció el 23 de este mes.
En su época de gloria en el baloncesto, desde Colón hasta Panamá, se destacó por su estatura de 6 pies 6 pulgadas, su gran capacidad como reboteador y su aguerrido desempeño debajo del aro. Jugó junto a los mejores de los años 40 y 50, asistiendo a cuatro Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Estudió y se inició jugando baloncesto en el colegio La Salle de Colón. Era un espigado jugador de seis pies, seis pulgadas, y por su estatura era algo así como el Magic Johnson de su época: armaba y pivoteaba cuando el conjunto lo ameritaba. “Nando” llevó a su colegio, La Salle de Colón, a vencer al Instituto Nacional de Veraguas en el Campeonato Nacional Intercolegial en la década del 40, según lo describe Dave Peralta, otro grande del aro y el balón.
Conocí a "Nando" a finales de 1969, cuando era presidente de la Federación de Béisbol. Era un caballero, hombre de familia y amante del deporte. En esos años, yo comenzaba mi trayectoria escribiendo sobre el gran juego. También conocí a su esposa Dorothy y a su hija Bonnie, cuando era pequeña. Nando era tío del profesor Pipo Celis y del Dr. Manuel Zambrano, famoso bolichero y hoy viceministro de Salud.
Tom Gutiérrez fue también presidente de la Federación de Baloncesto y, junto a su hermano Fifi, formaron una formidable pareja de dirigentes. Además, fue director técnico del INDE y tesorero del Comité Olímpico Nacional. Cuando el Salón de la Fama abra sus puertas a los dirigentes, sin duda, Nando entrará con luz propia.
En 1989, después de la invasión, trabajó con Darío "Chinchorro" Carles en la Contraloría y el Banco Nacional, apoyando la puesta en orden de las finanzas del Estado. Nando había sido gerente de auditoría del Chase Manhattan Bank y auditor internacional. Él y Carles eran grandes amigos desde sus tiempos en el banco norteamericano.
A nivel internacional, ocupó el cargo de secretario ejecutivo de la FIBA y se codeó con los mejores dirigentes de aquellos años, como Manuel González Guerrera, Juan Issa, Carlos García, Juan Zambrano, Osvaldo Gil, Carlos Secca, Darío Cano del Río y Juvenal Sáenz, entre otros. Eran los grandes dirigentes del béisbol amateur de los años 60 y 70, y Nando era parte de ese grupo, con una gran visión sobre los campeonatos mundiales.
En los VIII Juegos Centroamericanos y del Caribe en Caracas, en 1959, Fernando rompió el récord entre los panameños al competir por cuarta ocasión en estos juegos, habiendo participado anteriormente en 1946, 1950 y 1954.