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Panameños guardados en casa y recuerdos del 89
Desde la invasión de Estados Unidos a Panamá en diciembre de 1989 para capturar al dictador Manuel Antonio Noriega (1934-2017) no había habido un toque de queda en el país,
Calles desiertas, negocios cerrados y supermercados fuertemente vigilados: es la estampa de la Ciudad de Panamá este miércoles, primer día de la cuarentena total para frenar el COVID-19, que ha causado 8 muertes y 443 contagios, y que a muchos les hace recordar la invasión de EE.UU. a Panamá en 1989.
En un recorrido, Efe constató la presencia de muy pocos viandantes y autos en las calles; los negocios seguían cerrados, como ya ocurre desde hace dos semanas cuando se clausuraron los comercios no indispensables.
Había algunos retenes de policías en vías neurálgicas, como la calle 50, en los semáforos no estaban los habituales vendedores ambulantes con diarios y frutas, y la zona industrial de Costa del Este, ubicada en una de las salidas de la capital, amaneció clausurada y con acceso solo para trabajadores de empresas esenciales situadas allí.
El toque de queda comenzó a regir a las 05.01 hora local (10.01 GMT) de este miércoles y está establecido en el Decreto Ejecutivo 507, que dicta además una ley seca o prohibición de distribución y venta de licor durante el tiempo que esté vigente la medida.
El presidente Laurentino Cortizo, dijo que la cuarentena total se ha establecido "de manera indefinida" aunque de ella están exentos sectores vitales como el sanitario, alimentos, farmacéutico, seguridad pública, transporte y comunicaciones, bancos y prensa.
Los ciudadanos podrán salir de su casa diariamente dos horas para abastecerse de necesidades básicas y mediante un sistema de turnos basado en el número de identificación nacional.
Analistas locales hablaban este jueves de que el toque de queda total durará al menos 30 días y sugirieron al Ejecutivo acudir a organismos internacionales para obtener fondos que permitan afrontar la crisis económica derivada de la casi paralización total del país.
Esta medida extraordinaria que busca la inmovilización de la población para frenar al expansión del virus está acompañada de otras de carácter económico, como una ayuda extraordinaria para los trabajadores obligados a quedarse en casa, la reducción de la tarifa eléctrica y el aplazamiento del pago de impuestos e hipotecas.
Desde la invasión de Estados Unidos a Panamá en diciembre de 1989 para capturar al dictador Manuel Antonio Noriega (1934-2017) no había habido un toque de queda en el país, aunque las características entre ambas situaciones distan mucho, comentó a Efe la ingeniera panameña Yadisel Buendía.
Aquel fue "un toque de queda autoinstaurado. No había Policía cuidando, las fuerzas de defensa (militares) habían huido y le tocaba a los vecinos turnarse para cuidar las casas de los maleantes. Si salías, había bala", recordó Biendía.
La invasión además comenzó un 20 de diciembre, lejos de la quincena y mucha gente no tenía provisiones: "Ahí sí floreció la solidaridad y se compartía entre vecinos lo que había, fue espontáneo".
El toque de queda total con excepciones instaurado desde este miércoles forma parte de las medidas de distanciamiento social que el Gobierno de Panamá ha ido escalonando en las últimas dos semanas, que incluyen la suspensión de clases y la prohibición de la entrada de extranjeros al país.