Renuncia Procuradora de Panamá
La jefa del Ministerio Público concedió una entrevista a un solo medio: Radio Panamá y aunque dijo que no podía controlar lo que se dijera de ellas, alegó que algunas de las informaciones de los Varelaleaks, fueron distorsionadas.
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La Procuradora de la Nación, Kenia Porcell, anunció su renuncia a partir del 1 de enero de 2020. Agobiada por la filtración de los #Varelaleaks, la funcionaria dijo que este miércoles presentará su carta de dimisión al mandatario de Panamá, Laurentino Cortizo.
Aunque Cortizo había dicho que Porcell le daría la cara al país, la jefa del Ministerio Público concedió una entrevista a un solo medio: Radio Panamá y aunque dijo que no podía controlar lo que se dijera de ellas, alegó que algunas de las informaciones de los Varelaleaks, fueron distorsionadas.
Kenia Porcell afirmó que no ha cometido ningún delito, pero por la imparcialidad de las investigaciones, prefiera renunciar... "para tener paz".
La filtración Varelaleaks pone al descubierto una excesiva comunicación de Porcell con el expresidente Juan Carlos Varela al punto que en un día intercambiaban hasta 200 chats.
Según Varelaleaks, el expresidente se identificaba en WhatsApp como JJ y en esos mensajes con la Procuradora se trataban temas delicados con el manejo del caso Odebrecht, negocios en el Gobierno, el control de medios de comunicación a través de allegados como Fernando Berguido, ventajas para la aerolínea Copa, la ruptura de las relaciones con Taiwan y la crisis de Venezuela y de Nicaragua.
Ya el 19 de mayo de 2018, a Kenia Porcell le inquietaba algo o tenía un pálpito. ¡Quiero irme ya...es algo mío, siento que debo irme...déjeme ir por favor!, suplicaba Kenia Porcell al presidente Varela.
Varela intentaba calmar a Kenia Porcell, pero ella insistía: no quiero ser Procuradora, no es Martinelli... es el ser humano...ayúdeme a dejar este cargo lo más pronto posible por favor. Al final Juan Carlos y Kenia llegaron a una especie de pacto: ¡estaría hasta que él terminara su mandato: el 1 de julio de 2019, pero una propone y Dios dispone. La señora Porcell siguió, pero ahora sí renunció.