Testigo denuncia a los que armaron trama de pinchazos
El exagente del Consejo de Seguridad Jaime Agrazal detonó ayer una bomba en la audiencia de los pinchazos al revelar ante el juez XVI Enrique Pérez que los altos cargos del Consejo de Seguridad Rolando López Pérez, Jacinto Gómez Cisneros y Edgar Tion Martínez lo presionaron para embarrar en el caso a Gustavo Pérez, Alejandro Garuz y el exmandatario Ricardo Martinelli.
Bajo juramento, Agrazal reveló que estando detenido por un caso de drogas en Chiriquí llegaron varios militares y fiscales para hacerle ofrecimientos de ayuda y lo trasladaron en un avión del Senan hasta la ciudad de Panamá.
El abogado Cristóbal Arboleda reveló que Agrazal no solo se retractó, sino que explicó con lujo de detalles quiénes fueron hasta la cárcel de David para decirle que debía mencionar a Martinelli y a los exdirectores del Consejo de Seguridad Pérez y Garuz.
“Le dieron los nombres que debía decir de las personalidades a las que supuestamente les había dado seguimiento”, reveló Arboleda, explicando que Agrazal mencionó directamente a los militares Rolando López, Jacinto Gómez y Edgar Tion.
Por su parte, el abogado Roinier Ortiz alegó que alguien contacta a Agrazal vía “Popi” Varela y este a su vez los remite con la gente del Consejo de Seguridad.
Según Ortiz, el fiscal Marcelino Aguilar le ofrece una especie de trato a Jaime Agrazal y lo trasladan desde una cárcel de David a Panamá y lo llevan a las oficinas del Consejo de Seguridad, donde le presentan a Kenia Porcell, y le dicen que colabore porque ella sería próximamente procuradora.
Luego Jaime Agrazal es “escondido” en la oficina del director de la Policía, Omar Pinzón, y en ese tiempo, los del Consejo de Seguridad le decían todo lo que debía declarar. Luego fue enviado a la cárcel El Renacer.
Tanto Ortiz como Cristóbal Arboleda aclararon que lo único que se llevó a las oficinas de Ricamar fue un anaquel y ningún equipo, como falsamente intentó proyectar el equipo de espionaje de la Presidencia de la República.
Ahora en el caso de los pinchazos, el supuesto testigo protegido desapareció y el segundo testigo se retracta y revela cómo se armó toda la trama, resaltó Roinier Ortiz.
El juez Enrique Pérez, tras escuchar el testimonio de Agrazal, indicó que solicitará la apertura de una investigación con base en sus revelaciones.
Hasta el propio fiscal Ricaurte González calificó de “grave” lo dicho por Jaime Agrazal, pero intentó matizar, alegando que el “primer testimonio siempre es el válido”.