Grisel BethancourtCrÃticaProducir es un sinónimo de vivir, la tierra aloja en su interior el secreto de la fortuna, que invita a ser descubierto con ferviente clamor de absolutas tentativas, brindando completa hospitalidad a las manos hábiles del hombre de cualidades, liberales.Corrientes de energía que transitan animadas, pondrán sobre la mesa el desarrollo de las fuerzas en el elemento pensante de tendencias positivas.
Y en organización adecuada, podrían abrirse las vías expeditivas para que se experimente una fogosa transformación económica en el país de tipo ascensional.
Pero el mundo continúa detectando manifestaciones de índole sus pendidas, tendiendo a denunciar tirantez, porque cada día se reduce el número de personas que se dedican a trabajar con cuidado, explotando los recursos naturales globales.En nuestro país se puede ver muy claramente un bajo porcentaje de la población que vive en las áreas rurales, Las tácticas aplicadas no son las mejores para que se de un solvente crecimiento evolutivo económico.Tenemos en la actualidad la empalagosa situación, el reflejo de un éxodo constante de personas hacia la ciudad abanicando la dispersión de la población en las áreas rurales, abriendo un boquete en el crecimiento poblacional citadino, Es concebible que la situación económica se presenta precaria, reflejada en la consecución de los alimentos primarios, donde se puede instaurar como aliciente, la combinación de recursos económicos, aliada a la cooperación con los sectores de poder de la economía operante.
Preguntas sin respuestas nos dejan pávidos, desconociendo las vías de las complejas certidumbres.