La lamentable muerte de un niño de 12 años, ahogado en el río Sucre en Chilibre, nos vuelve a recordar el peligro de las llamadas cabezas de agua en la temporada lluviosa de nuestro país.
RedacciónLa lamentable muerte de un niño de 12 años, ahogado en el río Sucre en Chilibre, nos vuelve a recordar el peligro de las llamadas cabezas de agua en la temporada lluviosa de nuestro país.Durante tres días, las unidades del Sistema Nacional de Protección Civil estuvo buscando su cuerpo hasta que fue encontrado en la desembocadura del río Chilibrillo.
En julio pasado, tres mujeres también fueron barridas por una cabeza de agua mientras se bañaban en una afluente del río Cabobré en Pacora.
Las cabezas de agua en los ríos son rápidas y dan poco tiempo para reaccionar, lo que las hace mortales.Personas que se bañan en aguas aparentemente tranquilas ni se dan cuenta hasta que quedan envueltas en un violento torrente lodoso combinado con ramas de árboles y piedras.Es por esto por lo que el Sinaproc recomienda no bañarse en ríos durante la época de lluvias.
Mientras disfrutamos de aguas calmadas en un tramo de la quebrada, no nos percatamos de si está cayendo un fuerte aguacero a decenas de kilómetros de distancia río arriba, y esto podría significar nuestra muerte.En caso de personas que forzosamente deben cruzar ríos como parte de su rutina diaria, es importante siempre estar atento al cauce.
Si nota que comienza a subir el nivel y la intensidad de las aguas, salga rápidamente.Si el agua se torna lodosa, también debe salir.