Cativeños solicitan se gestione la instalación de una turbina

Los moradores de la comunidad de Cativé, en el distrito de Soná de Veraguas, se cansaron de beber del agua que proviene de una quebrada cercana, la cual no tiene ningún tipo de tratamiento y cuyo punto de captación es compartido con animales que llegan allí a saciar su sed.

Inocenta Guerra, residente en Nanzal de Cativé, manifestó que el principal problema que enfrenta la comunidad es la calidad del agua y aunque sale suficiente por los grifos, desconfían de que sea apta para consumo humano.

La denunciante expresó que toda la comunidad ya se ha reunido y han expresado que está dispuesta a pagar por el servicio que se ofrece en el acueducto rural, siempre y cuando sea un agua limpia que no represente riesgo para la salud.

Irene Peña, morador del lugar, indicó que las autoridades locales deben gestionar la construcción de una turbina que los abastezca de agua potable aprovechando que ahora llegó la energía eléctrica a la comunidad. Dijo que ya se cuenta con la red de tuberías, los tanques de almacenamiento y solo tendrían que cambiar la fuente que los abastece.