Panamá intentó con lo que pudo, pero el destino quiere que la Copa Oro, máximo torneo de la Concacaf, siga siendo un asunto entre Estados Unidos (5)
Redacción/Crítica / Panamá intentó con lo que pudo, pero el destino quiere que la Copa Oro, máximo torneo de la Concacaf, siga siendo un asunto entre Estados Unidos (5) y México (6), quienes lideran el palmarés.Ayer, la Roja jugó un partido muy serio, equilibrado y de pocos errores, intentando meterse entre los campeones, no lo logró, porque ofensivamente bajó su rendimiento.
El motivo de esa merma tuvo que ver con Alberto “Negrito” Quintero, anulado por los hombres de Jürgen Klinsmann, tal como ocurrió en Seattle, por la Hexagonal.
"La ausencia" de “Negrito”, producto del buen marcaje que le impuso Klinsmann, debilitó el juego ofensivo de la Roja, tornándose espeso y sin profundidad.Brek Shea, que no tenía ni un minuto (69) de haber entrado al campo, le dio el título a Estados Unidos y destrozó la ilusión de Panamá de levantar la Copa.Otra vez los gringos se meten en el camino de la Roja y la gloria.