Hoy es uno de los conductores de CNN en español y director de su propio programa de entrevista, llamado Cala. ¿Ya saben de quién hablamos? Sí, de
Lehisy Domínguez /VIVA / Fotos: Abel Rodríguez Hoy es uno de los conductores de CNN en español y director de su propio programa de entrevista, llamado Cala.¿Ya saben de quién hablamos? Sí, de Ismael Cala.
Tuvimos la oportunidad de conversar con el comunicador, y nos reveló detalles de su vida, gustos y triunfos.
¿Cómo te describes?Me describo como un intrépido, curioso.Trato de mantener esos rasgos de la niñez que son tan lindos, espontáneos, de no perder la esencia de asombrarse de las cosas y a veces me describo como un don Quijote, porque no tengo tierra firme.¿Qué no le gusta del comportamiento de las personas?Detesto la hipocresía, la gente intolerante, que creen que tienen una única verdad, que creen que su religión es la única que tiene Dios en el mundo.
Porque una persona intolerante no es capaz de amar.¿A quién es más difícil de entrevistar, a un político o personaje del “jet set”?Pues depende del carácter y la personalidad de la persona.
Pero sí te puedo decir que mi reto más grande es con los políticos porque ellos forzosamente están entrenados, tienen asesores que los traen de afuera y le pagan una millonada.Y estos asesores lo que hacen con los políticos es justamente prepararlos para ser manipuladores de opinión.¿Cómo logra dialogar con los políticos?Hay unos más fáciles que otros y te puedo decir con toda sinceridad que el presidente que ustedes tienen es el más fácil para dialogar, porque él es espontáneo y sincero.Él responde y por eso me divierto y gozo una entrevista con Ricardo Martinelli.Es de los pocos políticos que se atreve a contestar con sinceridad, y eso es un beneficio.¿Y su técnica para los artistas?Es fácil, ellos siempre quieren agradar a su público, son un libro abierto.¿Hasta dónde llegaría por una exclusiva?No es preocupación mía buscar una exclusiva, ya que mi propósito como comunicador va más allá de inspirar.El periodista tiene que buscar una exclusiva para que su carrera florezca y para sentirse una estrella; y si enfocas tu vida en eso, morirás como periodista.A mí no me importa eso, yo quiero enviar un mensaje humano y transcendente y es la clave por la que el público me sigue.¿Qué le gusta de Panamá?Por supuesto que el buen manejo del Canal de Panamá.Y que la gente sea “bochinchera”, eso me lo dijo Ricardo Martinelli la vez que lo entrevisté.“Cala, no le hagas mucho caso a los panameños que son bochincheros”.De las entrevistas que hizo en Panamá, ¿cuál recuerda?A las hijas de Noriega, pues fue notable el nerviosismo, pensaban en el qué dirán, cómo saldremos.Pero yo me puse en su lugar y dije no estoy aquí para juzgarlas, agredirlas, sino para escucharlas y eso se los agradezco.