Ryan Lochte lucha contra su adicción al alcohol para estar en Tokio 2020
El seis veces campeón olímpico está en un tratamiento para desintoxicarse.
Ryan Lochte lucha por salir de su dependencia al alcohol.
Por: Estados Unidos/ AP -
El nadador estadounidense Ryan Lochte, seis veces campeón olímpico y actualmente suspendido hasta julio de este año por violación de las reglas antidopaje, está siguiendo un tratamiento para vencer su adicción al alcohol, según anunció su abogado, Jeff Ostrow.
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Ostrow indicó que Lochte está en tratamiento para desintoxicarse e intentar clasificarse para su quinta participación en unos Juegos Olímpicos, en Tokio 2020.
“Ryan sabe que vencer a esta enfermedad le es ahora indispensable para evitar tomar malas decisiones en el futuro, para ser el mejor marido y padre posible y si quiere llegar a su objetivo de volver a dominar en las piscinas en sus quintos Juegos Olímpicos”, declaró el letrado.
La decisión de acudir a un centro de desintoxicación para curarse llegó después de que en octubre del año pasado se dio un incidente en su hotel de California, donde la policía intervino después de que el nadador intentó entrar por la fuerza en su propia habitación.
Menos de 24 horas después, Lochte se vio implicado en un accidente de coche en Gainesville (Florida) y fue citado por la policia por “conducción imprudente”, sin que se hiciera mención alguna al consumo de alcohol en el informe policial.
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El nadador fue sancionado diez meses en 2016 tras verse implicado en un rocambolesco caso de agresión inventado durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro tras una noche de fiesta. Lochte y sus compañeros de equipo Gunnar Bentz, Jack Conger y James Feigen se inventaron un presunto robo por parte de dos falsos policías cuando volvían a su hotel en la ciudad brasileña.
En realidad, los nadadores habían orinado en las paredes de una gasolinera y arrancado unos carteles antes de encararse con un vigilante y el conductor de un taxi que llamaron a la policía.
El campeón olímpico cumple actualmente una pena de 14 meses de sanción, hasta julio de este año, infringida por la agencia americana antidopaje por violación de las reglas después de haber recibido una inyección intravenosa prohibida.