Puro chifeo, mijo
El técnico colombiano Hernán Darío "El Bolillo" Gómez se hizo el desentendido en la mañana de ayer. El timonel le huyó al paredón en el que debió estar para responder las preguntas que le iba a disparar la batería de periodistas que se dieron cita en el Rommel Fernández para darle cobertura al entrenamiento matutino, previo al partido de esta noche frente a Trinidad y Tobago.
Lo que hizo "El Bolillo" ayer resultó un hecho atípico, ya que en los últimos 20 años los distintos técnicos que han dirigido a las selecciones nacionales siempre han encarado los cuestionamientos de la prensa, antes de cada partido.
Nadie de la Fepafut se acercó a dar explicaciones sobre la decisión del jefe del cuerpo técnico de Panamá de no brindar declaraciones, pero en los pasillos del Rommel los comentarios apuntaban a una sola dirección: el colombiano quería evitar ser cuestionado sobre la debacle de la Sub-23, que dirigió el argentino Leonardo Pipino, en el torneo Preolímpico. La decisión del técnico mundialista habría sido tomada tras la lluvia de plomo que le llovió a él y su cuerpo técnico en las redes sociales.
A "El Bolillo" y su asistente, Nelson Gallego, se le reclama el haber esquivado la responsabilidad de dirigir la Sub23; de no asumir el riesgo, como sí lo hizo Jorge Luis Pinto en Honduras.
Fepafut había establecido como regla que el técnico hablaría el primer día de entrenamiento de la semana, y un día antes de cada partido. Jamás lo hizo esta semana.
Técnicos como el uruguayo Miguel Mansilla (q.e.p.d), Leopoldo Lee, el rumano Mihai Stoihita, José "Cheche" Hernández, Alexandre Guimaraes y Julio Dely Valdés, por mencionar solo algunos, siempre dieron sus impresiones sobre cada partido.
Además del tema de la Sub-23, en el tintero de la prensa deportiva nacional quedaron preguntas como: ¿Cuál es la situación del equipo tras la baja de Harold Cummings? ¿Qué espera "El Bolillo" Gómez del partido de hoy y del próximo 13 de octubre frente a México? ¿Por qué se sometió a Baloy a trabajos extras, siendo este el jugador más experimentado?
Pero, tras lo hecho por el colombiano ayer, salta a la palestra otra interrogante: ¿Cómo es posible que un hombre con cuatro mundiales evada los cuestionamientos?