Una cacharpa sin repuesto
Por: LUIS ALBERTO GIRALDO MUÑOZ/ @ProfeGiraldo -
Hace cuatro años (inicio del proceso con Julio Dely Valdés), el fútbol panameño contaba con una de las mejores generaciones de futbolistas en su historia.
Teníamos jugadores legionarios en plenitud de sus respectivas carreras, brillando en importantes ligas de Latinoamérica.
Sin dudas, ostentábamos un poderoso “Ferrari” rojo que solo necesitaba un piloto experto para “volar” en las eliminatorias hacia Brasil 2014.
La impericia de aquel piloto y situaciones extrañas que ocurrieron en la fatídica fecha del 15 de octubre del 2013 nos dejaron con los crespos hechos.
La eliminación produjo una hecatombe de la que aún no nos recuperamos.
Desde aquel partido frente a Estados Unidos, es evidente que las condiciones futbolísticas de aquellos legionarios no son las mismas. El poderoso “Ferrari” rojo hoy solo es una cacharpa.
Dura realidad. No solo porque los años no pasaron en vano para aquellos jugadores que merecen nuestros respetos, sino porque los que antes brillaban ahora juegan en ligas menos importantes. Y a veces ni juegan…
Para revertir el “estado cacharpa” de nuestra “sele”, la Federación Panameña de Fútbol (Fepafut) contrató a Hernán “El Bolillo” Gómez, un DT en desuso, ya en el ocaso de su otrora exitosa carrera como orientador de selecciones y, no tanto, como manejador de equipos en clubes.
Penedo, Baloy, Machado, Parris, “Gavilán”, Blas, Tejada, Nurse, Coco, todos sobrepasan los 30 años. Cummings, Cooper, Gabriel Torres y Quintero (menores de 30 años) juegan poco o no juegan en ligas importantes.
La situación se agrava con la lesión de Román Torres. El “Mazinger” era el 75% de nuestra defensa. Aníbal Godoy es un oasis en un desolado desierto de figuras.
Dura tarea para “El Bolillo”, quien, lejos de trabajar a tiempo completo buscando repuestos para la CACHARPA DEL FERRARI entre los jugadores de la Liga Panameña de Fútbol (LPF), se limita a esperar y hacer magia con los legionarios.
¿Es un mago “El Bolillo”? o ¿un vago?