Golazo - 16/10/13 - 12:19 PM
Una generación panameña se va sin mundial
Panamá necesitaba ganarle a Estados Unidos y que Costa Rica hiciera lo mismo contra México en San José para clasificarse a un repechaje contra Nueva Zelanda. El resultado en suelo tico se le dio con la derrota 2-1 de México, pero no la pudo capitalizar en su propio feudo.
PANAMA
AP
Una vez se dio el pitazo final que decretó la victoria de Estados Unidos, el defensor y capitán panameño Felipe Baloy cayó al césped y lloró. El delantero estadounidense Terrence Boyd se le acercó y le dio un abrazo en el suelo.
Baloy, de 32 años y uno de los referentes del fútbol panameño en la última década, se desmoronó luego de que el equipo norteamericano terminó ganándole a Panamá 3-2, al remontar el martes un marcador adverso con un par de goles en menos de dos minutos en tiempo de reposición en el cierre de la eliminatoria mundialista.
Panamá necesitaba ganarle a Estados Unidos y que Costa Rica hiciera lo mismo contra México en San José para clasificarse a un repechaje contra Nueva Zelanda. El resultado en suelo tico se le dio con la derrota 2-1 de México, pero no la pudo capitalizar en su propio feudo.
Con la eliminación posiblemente terminó la última oportunidad para Baloy y otros jugadores veteranos que ayudaron al crecimiento del fútbol panameño y que por su edad difícilmente estarían para el próximo proceso eliminatorio.
Ellos son los delanteros Blas Pérez (32) y Luis Tejada (31); el volante de contención Gabriel Gómez (29) y el portero Jaime Penedo (32). También se duda de que jugadores como el lateral Luis Henríquez (28) lleguen a la siguiente eliminatoria para el Mundial de 2018.
Penedo, Baloy, Gómez y Tejada formaron la columna vertebral de la selección que en 2005 alcanzó el subcampeonato de la Copa de Oro, y que disputó la fase final de las eliminatorias al Mundial de Alemania 2006, que de paso fue la primera a la que accedió este país con más tradición de béisbol que fútbol.
En la siguiente eliminatoria para Sudáfrica 2010, el equipo panameño fue eliminado prematuramente en una serie con El Salvador.
Nunca antes, entonces, los panameños habían estado tan cerca como en este proceso de clasificarse por primera vez a una Copa del Mundo.
Dirigido por Julio Dely Valdés, considerado el mejor futbolista panameño de todos los tiempos y quien tampoco pudo hacer realidad el sueño mundialista, el equipo canalero no aprovechó el mal momento de los mexicanos en este hexagonal.
Panamá solo sacó seis puntos de los 15 que disputó en casa, contrario a Estados Unidos, Costa Rica y, en menor proporción Honduras, que hicieron respetar su localía.
En los dos últimos encuentros volvió a emerger como figura el veterano Tejada, al meter el gol de la igualdad transitoria ante México el viernes en el Azteca, donde finalmente perdieron 2-1, y el de la victoria pasajera frente a los estadounidenses el martes, pero en ambos compromisos los panameños se dejaron sorprender al final y terminaron derrotados.
Dely libró de culpa a los jugadores y se responsabilizó de la eliminación. ``Los jugadores no deben sentirse culpables, pues dieron todo su esfuerzo para sacar el partido adelante'', dijo Dely, cuyo futuro en la selección quedó por resolverse.
AP
Una vez se dio el pitazo final que decretó la victoria de Estados Unidos, el defensor y capitán panameño Felipe Baloy cayó al césped y lloró. El delantero estadounidense Terrence Boyd se le acercó y le dio un abrazo en el suelo.
Baloy, de 32 años y uno de los referentes del fútbol panameño en la última década, se desmoronó luego de que el equipo norteamericano terminó ganándole a Panamá 3-2, al remontar el martes un marcador adverso con un par de goles en menos de dos minutos en tiempo de reposición en el cierre de la eliminatoria mundialista.
Panamá necesitaba ganarle a Estados Unidos y que Costa Rica hiciera lo mismo contra México en San José para clasificarse a un repechaje contra Nueva Zelanda. El resultado en suelo tico se le dio con la derrota 2-1 de México, pero no la pudo capitalizar en su propio feudo.
Con la eliminación posiblemente terminó la última oportunidad para Baloy y otros jugadores veteranos que ayudaron al crecimiento del fútbol panameño y que por su edad difícilmente estarían para el próximo proceso eliminatorio.
Ellos son los delanteros Blas Pérez (32) y Luis Tejada (31); el volante de contención Gabriel Gómez (29) y el portero Jaime Penedo (32). También se duda de que jugadores como el lateral Luis Henríquez (28) lleguen a la siguiente eliminatoria para el Mundial de 2018.
Penedo, Baloy, Gómez y Tejada formaron la columna vertebral de la selección que en 2005 alcanzó el subcampeonato de la Copa de Oro, y que disputó la fase final de las eliminatorias al Mundial de Alemania 2006, que de paso fue la primera a la que accedió este país con más tradición de béisbol que fútbol.
En la siguiente eliminatoria para Sudáfrica 2010, el equipo panameño fue eliminado prematuramente en una serie con El Salvador.
Nunca antes, entonces, los panameños habían estado tan cerca como en este proceso de clasificarse por primera vez a una Copa del Mundo.
Dirigido por Julio Dely Valdés, considerado el mejor futbolista panameño de todos los tiempos y quien tampoco pudo hacer realidad el sueño mundialista, el equipo canalero no aprovechó el mal momento de los mexicanos en este hexagonal.
Panamá solo sacó seis puntos de los 15 que disputó en casa, contrario a Estados Unidos, Costa Rica y, en menor proporción Honduras, que hicieron respetar su localía.
En los dos últimos encuentros volvió a emerger como figura el veterano Tejada, al meter el gol de la igualdad transitoria ante México el viernes en el Azteca, donde finalmente perdieron 2-1, y el de la victoria pasajera frente a los estadounidenses el martes, pero en ambos compromisos los panameños se dejaron sorprender al final y terminaron derrotados.
Dely libró de culpa a los jugadores y se responsabilizó de la eliminación. ``Los jugadores no deben sentirse culpables, pues dieron todo su esfuerzo para sacar el partido adelante'', dijo Dely, cuyo futuro en la selección quedó por resolverse.