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Muere otro cadete que fue herido durante atentado del ELN en Bogotá

El jefe de la Policía expresó también su solidaridad a la familia del cadete, quien murió 22 días después por las heridas ocasionadas por la explosión.
Personal de la Policía es visto en la entrada de la Escuela General Santander donde un carro bomba causó una explosión el pasado 17 de enero en Bogotá (Colombia). EFE/Archivo

Personal de la Policía es visto en la entrada de la Escuela General Santander donde un carro bomba causó una explosión el pasado 17 de enero en Bogotá (Colombia). EFE/Archivo

Por: Bogotá / EFE -

El número de cadetes muertos en el atentado de la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (ELN) contra la Escuela de Policía de Bogotá subió a 22 tras el fallecimiento de Andrés Fuentes, informó este viernes esa institución.

"Lamentamos la partida de nuestro cadete Andrés David Fuentes Yepes, quien falleció hoy debido a las heridas sufridas por el vil ataque terrorista", informó en Twitter el director de la Policía de Colombia, el general Oscar Atehortúa Duque.


El 17 de enero, el ELN atacó con una camioneta cargada con 80 kilos del explosivo pentolita la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander en Bogotá, acción en la que también resultaron heridas 66 personas y murió el conductor del vehículo, José Aldemar Rojas Rodríguez, miembro de la guerrilla.
El jefe de la Policía expresó también su solidaridad a la familia del cadete, quien murió 22 días después por las heridas ocasionadas por la explosión.

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"Nuestra solidaridad a su familia, rogamos al todopoderoso les dé fortaleza en este momento de suma tristeza", añadió el general Atehortúa.
El pasado 27 de enero falleció en una clínica de Bogotá el también cadete Andrés Felipe Carvajal, quien estuvo 10 días en estado de coma.
Un día después del atentado, el presidente colombiano, Iván Duque, reactivó las órdenes de captura de los negociadores del ELN en los diálogos que ese grupo mantenía con el Gobierno y pidió a Cuba que los entregue.
Ante la petición, el Gobierno cubano se remitió a los protocolos del proceso de diálogo y desde entonces el mandatario colombiano ha reiterado la importancia de que La Habana entregue a los negociadores para llevarlos a la justicia.
El jefe de Estado colombiano argumentó que el atentado "fue un acto criminal violador de los derechos humanos y ningún acto de esa naturaleza amerita ningún protocolo que evite que se haga justicia".
Las negociaciones con el ELN comenzaron en febrero de 2017 en Quito y en mayo del año pasado fueron trasladadas a La Habana, donde la última ronda de diálogos concluyó sin resultados tangibles el 3 de agosto, cuatro días antes de la posesión de Duque.
A propósito de este atentado, el papa Francisco recordó durante su visita a Panamá, en donde participó la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), a cada uno de los policías muertos en el atentado.



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