Apoyan a migrantes deportados
Frente a la llegada de un grupo de 70 migrantes deportados desde Estados Unidos a Panamá y la falta de asistencia oficial tras su traslado desde la estación de recepción migratoria en Darién hasta Albrook, distintas entidades se unieron para brindar apoyo humanitario, entre ellas la Red Clamor de este país.
Las organizaciones que conforman la Red Clamor Panamá, junto con la Fundación de Asistencia al Migrante de la Iglesia Evangélica, el Comité Ecuménico, la comunidad musulmana y el Comité Interreligioso de Panamá, han estado trabajado de la mano para garantizar alojamiento, alimentación, artículos de higiene, asesoría legal, atención médica y apoyo psicológico a los afectados.
Los migrantes han sido acogidos en las instalaciones de Fe y Alegría Panamá y en el Hogar Luisa, centro administrado por la Pastoral de Movilidad Humana de la Arquidiócesis de Panamá. Además, UNICEF ha proporcionado atención especializada a los grupos familiares con niños y niñas.
El pasado viernes, el gobierno panameño otorgó un permiso humanitario por 30 días a estos migrantes, quienes previamente habían rechazado la ayuda para retornar a sus países de origen. En este contexto, Human Rights Watch y UNICEF asumieron los costos del alojamiento en un hotel local mientras se articulaban las respuestas humanitarias.