Panamá cederá presidencia de Corredor Marino a Colombia
Este acto marca el fortalecimiento de la cooperación internacional para la conservación de una de las zonas más biodiversas del planeta.
Ministros de Ambiente de 4 países se reúnen con el presidente Mulino para avanzar en la conservación marina
¡Un gran paso para la protección marina! Los ministros de Ambiente de Colombia, Panamá, Ecuador y Costa Rica se reunieron con el presidente José Raúl Mulino, quien recibió oficialmente el traspaso de la presidencia del Corredor Marino del Pacífico Este Tropical (CMAR).
Este acto marca el fortalecimiento de la cooperación internacional para la conservación de una de las zonas más biodiversas del planeta.
Lena Estrada, de Colombia; Juan Carlos Navarro, de Panamá; María Cristina Recalde, de Ecuador; y Franz Tattenbach, de Costa Rica, compartieron los avances obtenidos en el último encuentro de autoridades ambientales, realizado en Panamá. Durante la reunión, se destacó el Plan de Acción 2025-2035, que busca consolidar aún más esta alianza regional para preservar nuestros océanos.
El traspaso de la Presidencia Protempore de Panamá a Colombia se realizó bajo los principios de la Declaración de San José (2004), un acuerdo que instauró el CMAR como una estrategia clave para la protección marina en la región. Este corredor incluye 10 áreas marinas protegidas, siendo cuatro de ellas sitios de Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Además, se anunció la creación de una sede permanente para la Secretaría Técnica del CMAR en Panamá, garantizando una estructura de gobernanza sólida para seguir impulsando estos esfuerzos de conservación.
Los parques nacionales y reservas que conforman el CMAR son:
- Parque Nacional y Reserva Marina de Galápagos (Ecuador)
- Parque Nacional Isla del Coco (Costa Rica)
- Santuario de Fauna y Flora Malpelo (Colombia)
- Parque Nacional Coiba (Panamá)
También se incluyen otras áreas protegidas como la Reserva Marina Hermandad (Ecuador) y el Área Marina de Manejo del Bicentenario (Costa Rica), entre otras.
Este es un claro ejemplo de cómo la cooperación internacional sigue siendo vital para enfrentar los desafíos ambientales del siglo XXI. ¡El futuro del Pacífico sigue siendo una prioridad!