TORRIJOS Y LA REVOLUCIÓN EN NICARAGUA
El esfuerzo de guerra que inclinó la balanza a favor de las guerrillas Sandinistas fue el apoyo decisivo del general Omar Torrijos.
Por: Mayor Felipe Camargo A / Analista de Seguridad y Defensa. -
Se cumplen 44 años cuando se venció, por la fuerza de las armas, a la dictadura en Nicaragua de Anastasio Somoza Debayle. Fue el 19 de julio de 1979 cuando el FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) entró en Managua.
El esfuerzo de guerra que inclinó la balanza a favor de las guerrillas Sandinistas fue el apoyo decisivo del general Omar Torrijos. Cuba había mantenido por muchos años su impulso, pero nunca lograron producir un balance estratégico en la guerra contra el Somocismo.
En Panamá, para ese momento, se habían aprobado los Tratados Torrijos Carter.
Somoza representaba una amenaza contra el General Torrijos y para los tratados del Canal de Panamá. Solo hay que recordar cuando el golpe del 16 de diciembre de 1969 , que Torrijos evito sobrevolar territorio Nica. Y Somoza estuvo detrás del golpe militar.
OPERACIÓN CHANCHERA El 22 de agosto de 1978 se produce un asalto al Palacio Nacional, sede del congreso, que comandado por el Comandante Edén Pastora, “comandante 0”, “Dora María Tellez, “la comandante 2”, Hugo Torres, cuadros del FSLN. Es exitosa la operación. Después de dichas negociaciones, el comando parte para Panamá en aviones de la FAP (Fuerza aérea panameña). El enlace secreto para esta operación fue el Sargento José de Jesús “Chuchu” Martínez escolta personal del General Torrijos.
Los guerrilleros fueron alojados en el antiguo cuartel de Tinajitas, cuartel de la primera compañía de Infantería Tigres. Se inicia un proceso de entrenamiento táctico y técnico con morteros y lanzacohetes.
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LA ORDEN DE BATALLA . Coclesito. Días después, Edén Pastora y Dora María Téllez se reúnen con el General Torrijos, se da inicio y se acuerda apoyar a la facción de los Terceristas. Es en ese momento que el General Torrijos nos imparte la orden, al Doctor Marcel Salamín y a mi persona (en ese momento teniente de la escolta personal); la misión de desarrollar la guerra clandestina para derrocar a Somoza. Se cumplió la misión.
OPERACIÓN SECRETA. Se compartimentó al Estado Mayor de la Guardia Nacional de Panamá debido a que varios de estos oficiales eran egresados de la academia militar de Nicaragua, y tenían promocionales luchando contra los Sandinistas. El G-2 Teniente Coronel Noriega era el único que sabía de la misión. Toda la operación la dirigía el General Torrijos directamente.
LAS ARMAS. La primera misión fue conseguir armas para transportarlas de manera secreta, a los frentes de guerra en la frontera de Costa Rica y Honduras. Se sacaron del inventario de la armería de la Guardia Nacional un aproximado de 1,000 armas : tipo fusil, ametralladora calibre 30 y calibre 50, lanzacohetes y morteros calibre 60 mm. Hacía falta más armas para impulsar la guerra y el General Torrijos toma la decisión de solicitar más armas a Fidel Castro y nos envía al Dr. Salamín y mi persona a Cuba. Preferiblemente armas que no fueran del pacto de Varsovia.
Cuba nos entrega 5.000 fusiles FAL cal 7.62. armas de fabricación Belga que fueron del ejército de Batista. Lanzacohetes RPG-2, RPG - 7, morteros cal 82 mm, ametralladoras pesadas 2 bocas cal 12, 5 mm, cañones sin retroceso cal 90 mm. Con sus respectivas municiones. Se organizó un puente aéreo secreto. Todo el armamento se fue trasladando vía aérea en aviones de la FAP hasta las bases de Río Hato, David y donde se almacenaron.
Luego se organizó otra operación clandestina para infiltrar con aviones sin matrícula desde la base militar de Río Hato, David, el armamento y los guerrilleros que habían recibido entrenamiento. Estas operaciones se mantuvieron por meses hasta el final de la guerra.
Se organizó la Brigada Victoriano Lorenzo de panameños que voluntariamente fueron a luchar al lado de los Sandinistas. Había civiles y ex miembros de la Guardia Nacional con entrenamiento básico de infantería . Esta tropa recibió un nivel de entrenamiento básico y quedó bajo el mando del Dr. Hugo Spadafora y el "Charro" Espino. El joven Martin Torrijos participó . Entraron a Managua triunfantes.
EL FRENTE SUR. Comandado por Eden Pastora fue él quien recibió la mayor parte del apoyo logístico y fue donde luchó la Brigada Victoriano Lorenzo. Participamos varios oficiales y sargentos de la Guardia Nacional de Panamá , participando directamente en el esfuerzo de guerra. También hubo un puñado de asesores de las Fuerzas Especiales cubanas operando en conjunto .
El presidente Carlos Andrés Pérez envió a San José, Costa Rica aviones de combate tipo bombarderos para defenderla de una posible invasión de Somoza. Panamá envió helicópteros de transporte para apoyar a los ticos.
Se entregaron a Panamá bombas de aviación de 500 libras. Otra operación secreta, se adaptó un avión decomisado de drogas, como un bombardero y se le instalaron bombas.
La misión de bombardeo salió en vuelo nocturno en radio silencio, desde la base de Río Hato para atacar a Managua. Se cumplió la misión sin novedad.
El esfuerzo logístico, militar, político , diplomático del General Torrijos, coordinado con Fidel Castro inclinó la balanza a favor de los Sandinistas. Es el primer triunfo en América de una guerrilla que derrocó a un régimen por la fuerza de las armas.
La inteligencia en gran parte la proporcionó Cuba. Habían anclados en Vacamonte pesqueros cubanos que eran estaciones de monitoreo de las comunicaciones del Comando Sur de los Estados Unidos. Esta capacidad de inteligencia electrónica también se empleó durante la crisis final. (1987 a 89). Las diferentes embajadas donde los cubanos tenían cuadros de inteligencia operando a favor de la guerra en Nicaragua. Organizando movimientos de solidaridad con los Sandinistas se captaba fondos, medicinas y todo tipo de ayudas.
Fue la primera vez que se produjo una unidad latinoamericana para derrocar a un dictador. Con el apoyo político de los presidentes de: Venezuela, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Jamaica, España, Francia.
Hoy en Nicaragua hay otra dictadura. Que mantiene a su pueblo sufriendo.
