Conocer
Por: Milcíades Ortíz Catedrático -
Como experto en Sociología de la Comunicación, decidí analizar el lenguaje y las palabras que usan los brujos (as) en sus anuncios publicitarios de periódicos. La mayoría de los “trabajos” se refieren a asuntos de amor. Es fácil encontrar términos de una relación amor-odio-despecho. Palabra que aparece mucho es “amarre”, amansar, traer a los pies al que se fue. Hasta hablan de “endulzar” la relación amorosa. Garantizan el éxito y que la unión será permanente. Otro aspecto de tales anuncios es el económico. Va desde ganarse la lotería hasta conseguir entierros (guacas) con artículos valiosos.
Llama la atención el que se refiere a eliminar los “malos impuestos” (¿reavalúos de viviendas?). Varios se refieren a actividades agropecuarias. Si sus animales se están muriendo (¿sequía?) y los cultivos no rinden, ellos tienen la solución “garantizada”. Puede encontrar quienes curan los “vicios”, pero no dicen cuáles. Igual que la impotencia, depresión, soledad, nervios, y cualquier enfermedad por difícil que parezca. No crean que sean nuevos en esto. Por lo menos uno indicó que tiene treinta y cinco años (¡!) de vivir en Panamá. A veces en los anuncios ponen “testimonios” de personas que dicen haber tenido éxito con ellos.
Incluso se usan fotos que no sabemos si realmente corresponden al nombre mencionado. Respecto al tiempo, muchos señalan que pueden trabajar a distancia y al instante. Otros detallan que en una noche, seis horas, etc. Todos garantizan los resultados… No solo laboran en la capital. Algunos tienen oficinas en el interior. Por lo que he averiguado, allá utilizan mucho la radio para su publicidad. Para los pagos hay varias maneras. Unos hablan de consultas con cita previa. Otros resaltan que no cobran, sino que si Ud. está satisfecho, debe hacer una “donación”. Alguien resalta que quien sabe no cobra.
Muchos tienen el sistema que pague después de conocer los resultados. Todos garantizan el éxito de sus trabajos. Unos pocos resaltan que ellos sí saben, pero por lo general, cada uno publica lo que desea sin atacar a la competencia. Todos señalan con detalles las direcciones. Tienen teléfonos fijos, celulares, y los más modernos utilizan internet. Se supone que los pagos son en efectivo en la mayor parte de los casos. Los anuncios son permanentes en muchas situaciones. A veces no se publican los fines de semana. Puede ver los avisos en el mismo lugar por semanas. En la investigación se encontró casi nada que se relacionara con el Halloween (Día de los brujos) (continúa).