La basura inorgánica

La basura está compuesta por todos los despojos que resultan de desperdicios y otros productos que usamos en nuestra vida cotidiana y que ya no nos prestan ninguna utilidad y, por esa razón, la arrojamos a un contenedor destinado para recoger los desperdicios.

Pero no todo lo que llamamos basura presenta el mismo origen, por esta razón existe una clasificación de la misma que está estrechamente vinculada con el impacto que puede tener con el contacto directo con seres vivos y el medioambiente.

La basura inorgánica es aquel desecho cuyo origen no es biológico, es decir, no proviene de un organismo vivo, sino del medio industrial o es resultado de un proceso no natural. Los productos de tipo industrial, como por ejemplo los plásticos, las pilas y los frascos, los que se emplean en las fábricas y en los hospitales, tales como algodones, vendas, gasas, jeringas, agujas, son los más recurrentes considerados como basura inorgánica.

Este tipo de basura es muy contaminante y, por lo tanto, debe ser cuidadosamente evacuada en bolsas cerradas herméticamente y separada de la orgánica, por ser altamente peligrosa.

Una de las características de la basura inorgánica es que no se degrada a partir de medios naturales y tarda muchísimo tiempo, a veces siglos, en hacerlo.

Es muy importante que nos responsabilicemos de la importancia de clasificar la basura, por el bien de la humanidad, de la cual, nosotros, nuestra familia y nuestros descendientes formamos parte.