Hay preocupación en Herrera; aumentan hospitalizados

Las autoridades de salud de la provincia de Herrera se encuentran preocupadas, no solo por el incremento de casos nuevos de Covid-19, que suman más de 940 activos, sino porque muchos de ellos han tenido que ser hospitalizados.

Es así como la sala de Cuidados Intensivos del hospital Gustavo Nelson Collado mantiene sus 10 camas ocupadas, mientras que otros pacientes fueron trasladados  a hospitales de la periferia, o de la capital.

Ante el aumento vertiginoso que lleva la provincia en las últimas cuatro semanas en el número de casos, las autoridades de la Caja de Seguro Social han tenido que aplicar estrategias de reconversión dentro del hospital para ganar capacidad.

Luis Rodríguez, director médico institucional de la CSS en Herrera, indicó que este hospital recibe constantemente ingreso de pacientes para hospitalización por Covid-19 en estado moderado y crítico, lo que ha llevado a tener  una capacidad prácticamente al límite.

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Indicó que antes de aplicar algunas medidas para ganar camas, fue necesario trasladar pacientes a otros hospitales  como lo son el Luis Chicho Fábrega en Santiago de Veraguas, y el Rafael Estévez, en la provincia de Coclé.

A pesar de haber ganado camas de intensivo, dijo Rodríguez, de llegar pacientes críticos habrá que nuevamente realizar traslados a otros hospitales  de la periferia o al hospital Covid en la ciudad hospitalaria.

Hasta la fecha, la provincia mantiene 57 personas hospitalizadas, de las cuales 46 están en sala y 11 en UCI.

Para pacientes con síntomas leves, pero que requieran atención hospitalaria, se cuenta con las 40 camas adicionales que tiene el hospital campaña, recientemente inaugurado.

Sin embargo, fue enfático en señalar que se requieren médicos y enfermeras para esta instalación, para lo cual se adelantan las consultas que permitan suplir a este personal sanitario.

El director de la CSS indicó que la cooperación y disciplina ciudadana para evitar que el elevado número de contagios continúe en la provincia, de la mano del proceso de vacunación, es la estrategia fundamental para evitar que la capacidad hospitalaria se vea seriamente comprometida.