Neymar se une a Cristiano y Messi y ya tiene su grafiti en Kazán
Cristiano Ronaldo fue el primero que apareció pintado en las pintorescas calles de la ciudad rusa.
La ciudad de Kazán, sede del partido de cuartos de final del Mundial de Rusia 2018 entre Brasil y Bélgica, recibió este viernes a la selección 'canarinha' con un grafiti a gran escala de su gran estrella, Neymar.
El del astro es el tercer mural en honor a un futbolista que aparece en las calles de la capital de la región de Tartaristán, en las que ya se inmortalizaron grafitis del portugués Cristiano Ronaldo y del argentino Lionel Messi.
El alcalde de Kazán, Ilsur Metshi, aseguró el año pasado que en la ciudad había "un gran número de ubicaciones" en las que los artistas locales podían pintar retratos de jugadores reconocidos antes de la Copa del Mundo.
Cristiano Ronaldo fue el primero que apareció pintado en las pintorescas calles de la ciudad rusa, en verano de 2017, justo antes de la disputa de la Copa Confederaciones. En esa ocasión, la localidad dio la bienvenida al cinco veces ganador del Balón de Oro con un mural de tres pisos delante del lujoso Hotel Ramada, donde se alojó la selección portuguesa en sus partidos en Kazán.
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Los mismos artistas que pintaron el retrato del astro del Real Madrid fueron los encargados de dibujar el de Messi casi 12 meses más tarde, ya en plena Copa del Mundo.
Cuando Argentina viajó a la capital tártara para disputar el duelo de octavos de final del Mundial contra Francia, los funcionarios repararon en que desde las habitaciones del hotel de la 'albiceleste' se veía directamente el retrato de Ronaldo, por lo que mandaron pintar un grafiti de Messi.
El turno ahora, a las puertas de los cuartos de final del torneo, es para Neymar, quien se encuentra en Kazán con la 'canarinha' para disputar a orillas del río Volga su partido contra Bélgica.
El mural ha sido pintado esta vez en una ubicación diferente, y del Ramada se ha pasado a otro hotel oficial de la FIFA, el Mirage.
La alcaldía ha encargado a los mismos artistas que pintaron a Cristiano y a Messi, ambos ya fuera de la Copa del Mundo, un retrato en la pared del '10' brasileño, el gran candidato a destronar a los dos dominadores del fútbol mundial durante la última década.