Familia de veragüense secuestrado y torturado en 2018 pide justicia

Panamá- “Justicia” es lo que piden los familiares de Jaime Delgado, veragüense, que fue secuestrado y torturado por sus verdugos a los 32 años de edad, en el año 2018, y cuyo cuerpo fue encontrado en el 2019, para ello sus captores solicitaban a cambio se pagara un considerable suma de dinero, pero que al final los involucrados le quitaron la vida.

Noris González, madre de Delgado, dijo en exclusiva a este medio que a su hijo lo desaparecieron 20 de septiembre del 2018 por razones que ella desconoce y en el que hay cuatro personas involucradas, entre ellos un extranjero de nacionalidad venezolana.

La madre de la víctima, en medio del dolor y lágrimas, dijo que lo más triste es que hace cuatro años viven la misma zozobra cada vez que se anuncia el juicio y que las autoridades lo postergan, por lo que hizo el llamado al Ministerio Público para que no se dilate las fecha.

La madre de Jaime Delgado narró a este medio que según el expediente, después del secuestro, su hijo le dieron muerte en el 2019, tras las torturas a que fue sometido, según las investigaciones de las autoridades y que ahora consta en el expediente, siendo semi enterrado en la parte trasera de la casa del venezolano en la comunidad de El Espino de Santiago, vía Interamericana.

Explicó que de los cuatro involucrados en el asesinato de su hijo, hay uno que está privado de libertad al lograr acuerdo de pena y que aceptó su participación, otros esperan el juicio para enero de 2023, situación que mantiene preocupada a los familiares del hoy difunto.

Noris González, dijo que ella como madre se enteró ayer que en el expediente uno de los involucrados en el asesinato de su hijo dijo la muerte de Jaime se dio el día 22 de septiembre y lo metieron a un hueco junto con varios sacos de cal en el patio de la casa del extranjero para que los fuertes olores no se emitieran en caso de los rastreos que hacían las autoridades de investigación y la Policía Nacional.

Piden al Ministerio Público, que no se dilate más la fecha del juicio y que los asesinos paguen sus condenas, tal como lo indican las leyes de nuestro país.

La madre de Jaime Delgado, acepta que su hijo no era un angelito, pero que nadie tenía derecho a quitarle la vida tal como los hicieron sus verdugos.

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