Jefes deberían poner más atención y analizar conducta de jóvenes

El suicidio de tres unidades de la Policía Nacional ha hecho que surjan diversas hipótesis para explicar cuáles son las causas que llevan a un uniformada a quitarse la vida.

Una de las primeras conjeturas que saltan a la palestra son las horas hora de trabajo que tiene cada agente, además de los problemas familiares que enfrenta por su ausencia en el hogar.

Un experto aconseja que el jefe del cuartel debería hablar y analizar el comportamiento de cada policía, ya que si tiene problemas en el hogar no se le debería dar un arma y enviarlo a la calle.

Al detectarse es situación, lo mejor será ponerlo en la banca o en la sala de armas por varios días hasta que supere la situación. También nace la figura de la trabajadora social para que conozca a profundidad los problemas que enfrenta la persona.

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De igual forma, la fuente expresó que se deben eliminar los puestos remunerados (Fiscoi), regular los arrestos y los cuadros, que debe ser utilizados cuando sea necesario. 

Otro de los supuestos es el reducido grupo de policías que están en la calle, en comparación a los que trabajan de administrativos.

Un ejemplo que no demoró en salir fue el trato hacia las féminas, ya que si se ve bien la ponen a hacer informes y cosas bonitas, por su parte a las que consideran feas las que envían por las diferentes áreas.

Por su parte, se asegura, que los amiguitos del jefe no van a la calle. Se cree esos individuos ejercen funciones de conductor, hacer los mandados y la tareíta de la universidad.

La fuente considera que hay superpoblación de policías administrativos, esto hace que no haya la cantidad de unidades en las calles y exista un sobrecarga de trabajo, que podría estar cerca de las 16 horas de trabajo.