La mató a golpes y le rocea cal antes de arrojarla a tanque séptico

En cal y lanzada en un tanque séptico terminó la lamentable historia de una joven nicaragüense, que habría llegado a Panamá para mejor su futuro, tal como han hecho un número considerables de sus coterráneos.

Se trató de Elizabeth Guillén, de 24 años, quien quizá jamás pensó que la persona con quien compartía como pareja la terminara asesinando y tratar su cuerpo de una manera tan vil, que ha causado repudio en la población.

Fue un 23 de agosto que la madre de Elizabeth, quien vive en Nuevo Tocumen, corregimiento de la 24 de Diciembre, empezó a preocuparse, ya que no sabía del paradero de su hija e incluso hasta con amigos averiguó, pero nadie sabía nada, ni el celular respondía.

La angustia se fue apoderando de familiares y amigos, quienes iniciaron a divulgar una fotografía de la joven, quien es de tezmorena, cabello ondulado, así como acudieron a la Fiscalía de Atención Primaria en Las Mañanitas.

Mientras ellos buscaban, Elizabeth quizá ya habría sido asesinada a manos de su pareja, en un Laboratorio Dental, en la barriada San Cristóbal en Chepo, donde fue vista por última vez y donde visitaba frecuentemente al técnico en odontología.

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Un día después que se dio el reporte pudo ser el día en que el hombre de 58 años le dio un golpe por la cabeza a Elizabeth hasta acabar con su vida.

Pero no bastó con asesinarla, sino que le echó cal, para que supuestamente la descomposición del cuerpo fuera rápido y lo arrojó en un tanque séptico, plástico, de color negro y que estaba enterrado entre tallos en la parte trasera del laboratorio.

La desesperación de la familia se incrementaba a media que pasaban los días, incluso las autoridades en varias ocasiones entrevistaron al hombre de 58 años, pero no daba información correcta, sin embargo, contradecirse en algunas de las declaraciones fue el punto que puso en dudas a las autoridades sobre su inocencia.

Al parecer el remordimiento de conciencia y la presión llevó a que este sujeto se entregara a las autoridades y les indicara donde estaba el cuerpo de Elizabeth.

De inmediato las unidades del Servicio Nacional de Fronteras, Los Bomberos, SINAPROC se apersonaran al lugar junto al Ministerio Público, donde dieron con el hallazgo del cuerpo.

Abrir la tapa del tanque le costó un poco a las autoridades, ya que estaba con un pegamento fuerte, para evitar que el mal olor saliera.

El área considerada de suma tranquilidad, se vio alterada la noche del jueves cuando entre los moradores de Chepo corrió la vos sobre el macabro hallazgo, situación que los alarmó y llenó de consternación.

Según algunos lugareños, la casa donde funciona el Laboratorio se encontraba cerrado por días, pero que no levantó sospechas de lo que se había dado.

Después de 36 días las esperanzas de la familia, de encontrar a Elizabeth con vida, se desmoronó, pero de una manera tan cruel, por la forma en que se dio el asesinato, ya que ninguna persona está lista para perder de una forma tan aterradora a su familiar.

Nellys Herrera, directora del Instituto Nacional de la Mujer, indicó en sus redes “ No le bastó la #cobardía de matarla a golpes por la espalda, demuestra su desprecio a la vida de una #mujer arrojando su cuerpo entre el excremento en un tanque séptico. Un asesino “profesional” sin escrúpulo alguno.”

Las diligencias de levantamiento del cuerpo duraron varias horas y al día siguiente se realizó una diligencia de inspección ocular al laboratorio por parte del peritos del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, para buscar indicios sobre el asesinato.

El hombre, quien vestía un suéter y pantalón oscuro, fue puesto a órdenes del Ministerio Público para que sea presentado ante un Juez de Garantías en las próximas horas.