Viva - 25/3/14 - 11:16 AM
Utiliza ocho vestuarios en Barcelona
Fuegos artificiales y coreografías gimnásticas, formaron parte de "The Mrs. Carter Show World Tour 2014"
Redacción
Web
Cuando de sensualidad se trata, no hay quien le gane a Beyoncé. Y eso lo demostró en el escenario del Palau Sant Jordi de Barcelona, donde derrochó sensualidad ante la presencia de más de 18 mil espectadores, quienes vieron a la diva cambiarse de vestuario ocho veces.
Con un retraso perdonable, el escenario se ha abierto como las aguas del Mar Rojo y Beyoncé ha emergido como una diosa, dispuesta a hacer olvidar a los presentes la vulgaridad de lo cotidiano. Objetivo que ha cumplido con creces.
La norteamericana ha ofrecido dos horas de música, baile y espectáculo, en las que ha alternado temas de su último álbum con algunos 'hits' como "Blow" y "Naughty Girl".
Una banda musical de ocho mujeres muy solventes, tres coristas espléndidas, una decena de bailarines perfectamente sincronizados y un efectivo juego de proyecciones, pantallas y luces han acompañado a la reina de la música de baile con resonancias negras.
Pero, sin duda, lo más deslumbrante de la puesta en escena de Beyoncé es la propia Beyoncé.
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Cuando de sensualidad se trata, no hay quien le gane a Beyoncé. Y eso lo demostró en el escenario del Palau Sant Jordi de Barcelona, donde derrochó sensualidad ante la presencia de más de 18 mil espectadores, quienes vieron a la diva cambiarse de vestuario ocho veces.
Con un retraso perdonable, el escenario se ha abierto como las aguas del Mar Rojo y Beyoncé ha emergido como una diosa, dispuesta a hacer olvidar a los presentes la vulgaridad de lo cotidiano. Objetivo que ha cumplido con creces.
La norteamericana ha ofrecido dos horas de música, baile y espectáculo, en las que ha alternado temas de su último álbum con algunos 'hits' como "Blow" y "Naughty Girl".
Una banda musical de ocho mujeres muy solventes, tres coristas espléndidas, una decena de bailarines perfectamente sincronizados y un efectivo juego de proyecciones, pantallas y luces han acompañado a la reina de la música de baile con resonancias negras.
Pero, sin duda, lo más deslumbrante de la puesta en escena de Beyoncé es la propia Beyoncé.