Sexo tras el embarazo
La sexualidad después del embarazo es un tema que afecta a todas las madres, retomar el placer sexual para muchas resulta un proceso difícil y hasta
La sexualidad después del embarazo es un tema que afecta a todas las madres, retomar el placer sexual para muchas resulta un proceso difícil y hasta traumático.
Según la especialista Yunilca Brett, durante este proceso tener miedo es normal, pero hay que estar consciente de que el cuerpo está condicionado para retomar todas sus actividades.
Siempre se ha hablado de que la mujer debe esperar 40 días para retomar las relaciones sexuales; sin embargo, cada cuerpo es distinto, es por ello por lo que se debe acudir al médico y que este autorice retomar la relación sexual.
Sin embargo, hacer ejercicios vaginales es fundamental. Contraer y aflojar el músculo pubocoxígeno te preparará para el acto.
El deseo sexual retorna entra la tercera y cuarta semana tras el parto, por lo que puedes seguir estos consejos si estás decidida a revivir tu vida sexual.
-Buena comunicación: El diálogo entre la pareja siempre es importante, mucho más en una situación tan especial como la que sigue al parto. Expresar tus miedos y temores ayudará a que la relación sexual se active progresivamente. No necesariamente tienen que hacer sexo con penetración, los juegos sexuales y las caricias irán abriendo paso a la pasión.
-Usar trucos para recuperar el deseo: Ir de paseo, ir al cine a cenar, buscar un espacio para la pareja es importante después de que llegue el bebé.
-Encontrar un anticonceptivo adecuado: Un método anticonceptivo que sea seguro y que les permita disfrutar del sexo sin miedo a un nuevo embarazo es muy importante. Para ello, acude a tu médico si estás lactando.
Usar lubricantes: Los cambios hormonales pueden ocasionar sequedad vaginal. Para solucionar este inconveniente y superar el miedo al dolor, se pueden usar lubricantes y geles vaginales a base de agua.
En ciertos casos, los problemas sexuales tras el nacimiento del bebé perduran más allá de lo normal. Los principales son la falta de información y los temores.