Juego limpio japonés
El juego limpio puede conducir al éxito. Aunque vaya acompañado por un fútbol feo. Japón cayó el jueves por 1-0 ante Polonia, pero se coló a los octavos de final gracias al nuevo criterio de desempate basado en el “fair play”, al que se debió recurrir por primera vez en la historia de los mundiales.
El boleto quedó en manos de los japoneses también gracias al triunfo de Colombia en un encuentro simultáneo. La selección sudamericana fue la otra que avanzó a la siguiente fase en el grupo H.
Polonia, que llegó al cotejo ya eliminada, cerró al menos de manera honrosa su participación en la Copa del Mundo, tras caer en sus encuentros ante Senegal y Colombia.
Así que hubo necesidad de recurrir al último criterio, que castiga el mayor número de tarjetas amarillas y rojas recibidas por un equipo en el mundial. Senegal acumuló seis amarillas, por cuatro de Japón.
Es la primera vez en la historia que este criterio define la clasificación de un equipo en un mundial. De haber persistido la igualdad también en ese renglón, habría sido necesario un sorteo.
En los octavos de final, Japón se medirá con Bélgica el próximo lunes en Rostov.