Mulino: Ferrufino es un chef del carajo
El jefe del Ejecutivo aclaró que, a diferencia de la información que se divulgó, el permiso fue para colaborar en una actividad en el Centro de Rehabilitación Femenino y no en el restaurante de Tamburelli para hacer pizzas.
El presidente José Raúl Mulino justificó el permiso de salida especial para que Guillermo Ferrufino y Giacomo Tamburrelli, salieran de la cárcel El Renacer para hornear roscas navideñas.
El jefe del Ejecutivo aclaró que, a diferencia de la información que se divulgó, el permiso fue para colaborar en una actividad en el Centro de Rehabilitación Femenino y no en el restaurante de Tamburelli para hacer pizzas.
Hasta donde yo sé, conversé con la ministra (de Gobierno), fue en el centro de detención femenino. Eso está permitido en la ley... no es un privilegio en lo absoluto, sino un derecho al que puede optar cualquier detenido y que les ayuda a conmutar penas, alegó el gobernante.
La ministra Dinoska Montalvo explicó que se les otorgó el permiso, porque ambos tienen buena conducta y se han comprometido a enseñar a hornear al resto de los reclusos.
“No veo nada pecaminoso en eso, más allá del morbo permanente con relación a ciertas personas… Tienen derecho como cualquier detenido en el país, para usar el beneficio de estos programas para conmutar pena”, indicó Mulino.
Según Mulino, tanto Ferrufino como Tamburelli pueden aportar en enseñar a cocinar, porque tienen expertiz.
Además, destacó que cuando él estuvo detenido preventivamente junto a Ferrufino, fue un chef de primer orden. Se los digo sin ningún problema. Nos cocinaba a toda la cuadra supremamente bien cuando había con qué cocinar”, recordó Mulino.