Nuevo presidente de la Cámara pide frenar deuda y abordar IVM

Adolfo Fábrega García de Paredes fue juramentado como el  presidente No.72 de la  Cámara de Comercio de Panamá.

Fábrega dijo que su gestión estará enfocado en trabajar más en el observatorio de calidad de vida, el programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la Caja de Seguro Social (CSS), las finanzas públicas, el gasto y la deuda; así como, la educación.

También reveló que el gremio presentará el  Proyecto Agenda País, donde a través de foros se plantea la situación presente de los principales sectores que requieren de atención para el desarrollo de Panamá, y posterior se presentan recomendaciones de acciones a implementar a corto y mediano plazo en el siguiente quinquenio.

Informó que este año se invitará a otros actores de la vida nacional, como los son la academia, trabajadores, sectores productivos y empresarios por mencionar algunos, a firmar un compromiso de cara a establecer una visión compartida con indicadores consensuados que sea la base sobre la cual accionar y dejarle a la próxima generación un Panamá equitativo y en desarrollo.

Adolfo Fábrega resaltó que tanto este último año de administración gubernamental como el siguiente periodo son cruciales para Panamá. “La estabilidad socioeconómica del país y su desarrollo sostenible a largo plazo se encuentran en riesgo.

El comerciante advirtió que reiteró la Caja del Seguro Social y el fondo IVM, ya no dan para másy si para este mismo periodo el próximo año, sino actuamos, no habrá manera de garantizar su sostenibilidad.

Manifestó que los números son exactos y la información tanto interna de la Junta Técnica Actuarial como la externa de la Organización Internacional del Trabajo coincide, las reservas se agotaron y la solución no pasa por volver a un sistema que ya probó ser fallido ni en quitarle a los ahorristas del subsistema de cuentas individuales lo que por tanto tiempo han aportado. “Esto no es solidario y es robarles el futuro a esos jóvenes”.

Asimismo, Fábrega enfatizó que le preocupa sobremanera la ascendente deuda externa aunado a las crecientes cuentas por pagar por parte del Gobierno y la evidente falta de fondos para el mantenimiento y ejecución de obras críticas en Panamá y sobre todo, el aumento de la planilla estatal. Todo esto, careciendo de planificación y ejecución estratégica que promueva un crecimiento.