Dicen su destino, pero no hay taxi que los lleve
Por: Redacción -
En las afueras del Hospital Santo Tomás los conductores de taxis eligen a los pasajeros, a pesar de que necesitan urgentemente de su servicio. Hay personas que salen del recinto hospitalario en silla de ruedas por presentar fracturas en las piernas y los conductores no los quieren llevar.
Lo mismo ocurre con las mujeres embarazadas que salen de recibir atención médica bajo sol o agua, y los taxistas siguen su camino.