Matan a DT del San Francisco
Un grupo de niños observó cómo su entrenador de fútbol fue asesinado a tiros por un delincuente la mañana de ayer, en la cancha de fútbol Sanfra
Un grupo de niños observó cómo su entrenador de fútbol fue asesinado a tiros por un delincuente la mañana de ayer, en la cancha de fútbol Sanfra Camp, ubicada en la exclusiva zona de Costa del Este, en el corregimiento de Parque Lefevre.
Como si esto fuera poco, el homicidio se registró a pocos metros de una subestación de la Policía Nacional, situación que preocupa a sus residentes, quienes exigieron mayor seguridad.
Alfonso Anel González Calderón, de 38 años, apodado “Foncho”, el técnico de fútbol, recibió cinco tiros, según un reporte médico.
“Foncho” era entrenador desde hace más de un lustro de las filas del San Francisco, dijo un familiar de la víctima.
González quedó herido de muerte y fue trasladado en un patrulla de la Policía al Hospital Integrado San Miguel Arcángel, en San Miguelito, donde media hora más tarde la doctora Guevara dictaminó su muerte.
El técnico de la sub-13 y sub-15 del San Francisco fue atacado mientras conversaba con un hombre, informó un testigo, quien explicó que todo pasó rápido.
Según reportes oficiales, a las 9:00 a.m. llegó el homicida en un vehículo Nissan Sentra B-13 de color blanco, con placa terminación 93, y fue directo a atacar a Alfonso, quien se percató de la presencia del extraño.
En un último intento por salvarse, el entrenador agarró por los brazos a su compañero, a quien utilizó de escudo, mientras el homicida le hacía disparos.
Juego del gato y el ratón
El juego del gato y el ratón duró poco tiempo; Alfonso recibió primero un balazo en la mano izquierda, situación que aprovechó su compañero para zafarse, correr y esconderse de la situación embarazosa en que se encontraba.
El homicida hizo lo suyo y descargó su arma contra el técnico, por lo menos cuatro tiros en la cabeza.
A 150 metros de la escena del crimen, los niños que iban a entrenar presenciaron el homicidio; aterrados por el suceso entraron en pánico.
Los agentes de la Policía que se encontraban en la subestación de Costa del Este, ubicada a 200 metros de la escena, escucharon las detonaciones, pero al llegar era tarde, el asesino y su conductor habían escapado.
El móvil del homicidio no está claro, la víctima no tenía antecedentes penales y su único pecado era su lugar de residencia. Los Andes N.° 2, un barrio de San Miguelito que se está desangrando. Solo esta semana mataron al hijo de un teniente jubilado de la Policía Nacional, mientras que en 2013 hubo más de una docena de homicidios.
Hay una rivalidad por el control y dominio del territorio. En el lugar reza un comportamiento que se refleja en la consciencia de los habitantes: “No importa si eres inocente, pero si hablas con mi enemigo también lo eres mío”.