Miembros de un pandilla delictiva con integrantes de todas las provincias, entre ellos menores de edad, fueron detenidos por la Policía de Veraguas.
Los delincuentes son el dolor de cabeza de residentes de Santiago: roban a cada rato, asaltan a quien sea, azotan a los taxistas.
Los involucrados fueron arrestados en un hotel de Santiago con evidencias, pero horas después quedaron libres porque nadie los acusó.
Durante la captura se recuperaron cables robados, celulares, herramientas, y demás.