Espectacular inauguración
Sin duda espectacular fue la ceremonia que organizó Londres para inaugurar los Juegos Olímpicos, los terceros que se realizan en esa ciudad. El evento deportivo que congrega a 204 países y 10,490 atletas que buscan las 302 medallas de oro en disputa, acapara la atención mundial.
Los londinenses organizaron una Impresionante transformación del estadio olímpico en una gigantesca fábrica con humeante chimeneas que simbolizaba la Revolución Industrial; el evento era recreado por la música electrónica de Underworld y se apreciaron escenas de hombres vestidos como el mítico grupo The Beatles que rendían un homenaje a la canción Sargeant Pepper.
Luego para darle mayor espectacularidad, actores que representaban a la Reina Isabel II y el agente 007 se lanzaron en paracaídas desde un helicóptero y seguido se desarrolló el homenaje a la literatura infantil y luego la comedia representada por Mr. Bean
En fin fueron parte de los actos organizados para encender el grupo de anillos que simbolizan el olimpismo y la llama olímpica de estos juegos que tienen un costo cercano a los 15 mil millones de dólares.
Ayer, países que en su momento hicieron la guerra, conquistan el corazón del planeta a través del deporte.
Panamá no escapa a esa realidad, ocho superhéroes como bien lo definió la gloria Irving Saladino nos representan, con la esperanza de repetir una nueva medallas y que lleve al país a conquistar una tercera presea en esas competencias de alto rendimiento.
En Londres está nuestra bandera, la misma por la que tantos hombres y mujeres han dado hasta la vida. Esas cosas no tienen precio, no se compran, no tienen un valor monetario, van cargadas de sangre hecha de fuego... fuego puro y verdadero, el fuego que emerge de la llama olímpica, esa que jamás debe dejar de existir. El mundo la necesita más que nunca.