¿Cuáles son las intenciones de EEUU con Panamá?
El pensamiento estratégico de EEUU es tomarse el control de los mares, controlar de las rutas, estrechos y control de la flota mercante bajo nuestra bandera y un factor desconocido para el control del terrorismo mundial: verificar los miles de documentos de viaje la marinería. Busca retomar el centro financiero de Panamá. Reposicionar su proyección militar desde Panamá a través del Comando Sur.
Todos esos factores son nuestros activos y administrados por Panamá y su soberanía.
En 1989, EEUU invadió y se tomó el país. Impusieron en el poder a sus aliados en ese momento. Estos han venido variando con el tiempo. Esas fuerzas políticas, fueron mutando y tomando distancia de sus mentores y alineándose con potencias militares y económicas enemigas de EEUU.
El pensamiento estratégico imperante en Washington es que para desarrollar su poder mundial para tomarse el control de los mares y estrechos y canales asegurar el control del hemisferio occidental. Panamá con todos sus activos soberanos, deben estar bajo el control del Pentágono.
China viene desarrollando su plan estratégico de expandirse para poder asegurar la alimentación de su población y proyectar su poder comercial mundial requiere de tener el control del Canal de Panamá.
La nación panameña como siempre lo ha sido por siglos el lugar geográfico vital para el control de las rutas marítimas, su centro financiero y sus interconexiones de todo tipo.
El ataque a nuestra nación es profundo, no es como sucedió en 1989 con la invasión militar del 20 de diciembre. No completaron la misión de retomar el control real del país. Confiaron en una generación de políticos criollos, que ahora 35 años después por interés particulares e intereses de los poderes económicos locales, derivaron y se fueron alineando por conveniencia y beneficio, se alinearon con La China, Irán, potencias enemigas de los EEUU; con Japón, Brasil, Francia, España fuertes competidores comerciales. Traducido a la actual guerra comercial de los aranceles.
La inteligencia de todos esos países está operando clandestinamente en Panamá en función de fortalecer sus propios intereses comerciales, militares. Tienen ventajas porque no hay la capacidad del Estado panameño para neutralizarlas.
En 3 meses en el poder con la administración del presidente Donald Trump y con la nueva visión geoestratégica y desarrollando la doctrina MAGA. La proyección del poder militar del Potomac viene desarrollando no un ataque militar, sino que empleando métodos sutiles y efectivos, están en la fase ganar mentes y corazones del pueblo panameño entrando a el país suavecito y despacito.
En una situación impensable se saltaron los tratados internacionales, la neutralidad y toda la parafernalia del derecho internacional público. Con pasividad y poca reacción del pueblo a excepción de la izquierda.
El ataque directo de la intervención de nuestro socio estratégico está concentrado y los blancos son: No es solo el control de las operaciones del Canal de Panamá, sino las instituciones como la AMP, imponer una limpieza y corregir métodos y procedimientos, tomar el control de nuestra flota mercante, imponer controles a la marinería (más de 200.000) que esta amparados por las cartillas de hombres de mar y nuestro centro financiero. No es solo la presencia militar están presentes para garantizar los cambios profundos en Panamá.
Es nuestra nueva realidad y Panamá en defensa y seguridad está atrasada con la nueva realidad estratégica. El modelo policial post invasión se agotó. Ante las condiciones cambiantes de los desafíos geoestratégico-impuestos, la gran disyuntiva es que esta misma clase política antimilitarista, ahora está obligando a crear las Fuerzas Armadas nacionales.
Desde la visión de EEUU, Panamá no ha sido juicioso como lo dijo una vez el General Omar Torrijos con sus recursos.