Nacional - 13/1/16 - 08:15 PM
Peligran los culecos
"Estimamos que se utilizan casi 9 millones de galones de agua (34 millones de litros) solamente en las mojaderas de los culecos", indicó la titular de Ambiente.
Las autoridades panameñas se están planteando prohibir este año los famosos "culecos", camiones cisterna que desfilan durante los Carnavales regando con agua a los asistentes y que son todo un símbolo en el país, por la acuciante sequía que está asolando la región.
"Es evidente que hay escasez de agua (...) Hay que ser conscientes de que el agua que hoy desperdiciamos nos puede servir dentro de un mes o mes y medio", dijo la ministra de Ambiente, Mirei Endara, en una televisión local.
Endara, que instó a los panameños a ser "más racionales en el uso del agua", reconoció que el tema de los "culecos" va a ser analizado en el Gabinete de Gobierno de la próxima semana.
"Estimamos que se utilizan casi 9 millones de galones de agua (34 millones de litros) solamente en las mojaderas de los culecos", indicó la titular de Ambiente.
La suspensión de los "culecos" es la medida más extrema que podría adoptar el Gobierno panameño, pero antes de llegar a ese punto, explicó la ministra, tiene otras opciones menos drásticas como prohibir los desfiles de agua solo en las zonas más azotadas por la sequía o usar agua de río e incluso de mar, en vez de agua potable.
El Gobierno de Juan Carlos Varela es consciente de que los Carnavales son las fiestas más populares del país, que cada año atraen a miles y miles de turistas nacionales y extranjeros, y de que cualquier medida restrictiva será rechazada frontalmente por la ciudadanía.
"Al pueblo no le va a gustar. Como el Gobierno cancele los culecos, va a ser un lío, el pueblo se va a alborotar", admitió a Acan-Efe el taxista Eric Ariel Camaño.
Los Carnavales, que este año se celebran del 6 al 10 de febrero, son especialmente famosos en Las Tablas, la capital de la provincia interior de Los Santos, una de las que más está sufriendo los estragos por la falta de lluvias.
El fenómeno meteorológico El Niño ha agravado la situación y el pasado mes de agosto el Gobierno tuvo que declarar el estado de emergencia y decretar una serie de restricciones porque en la época de lluvias apenas cayó agua.
"Cancelar los culecos me parece una excelente idea porque tenemos un grave problema, el turismo se va a ver afectado y la gente no lo va a entender, pero es una necesidad, si perdemos nuestra fuente de agua lo perdemos todo", admitió a Acan-Efe el médico Ramiro del Castillo.