Perdiendo... la unidad familiar
En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos:
«Después de diez años... mis hijas de diez y quince años respectivamente... [y yo emigramos de nuestro país natal para] vivir junto a mi esposo y padre de mis hijas. Mi esposo y yo estuvimos de acuerdo en estar separados para que él trabajara en el extranjero, perdiendo así la unidad familiar....
Este es el consejo que le dimos:
«Estimada amiga:
»Lamentamos que le haya sido tan difícil adaptarse a las condiciones en el nuevo país. Y comprendemos lo difícil que es ver lo tristes que están sus hijas....
»Sin embargo, el hecho de que nos esté pidiendo consejo indica que en lo profundo de su corazón usted sabe que el vivir separada de su esposo no es una buena opción. Cada semana se comunican con nosotros mujeres así como usted, con un esposo que trabaja en el extranjero. Aun se han comunicado con nosotros niños que tienen padres que trabajan muy lejos. Gran parte del tiempo resulta que esos cónyuges no vuelven a vivir juntos, debido a que por lo general uno de los dos se enamora de alguien que vive cerca y con quien puede verse con regularidad.
»Es extraordinario que usted y su esposo hayan podido permanecer casados a pesar de haber vivido separados durante diez años. Pero no podemos dejar de preguntarnos:... ¿Cómo van [sus hijas] a cultivar el debido aprecio por el matrimonio cuando sus padres no piensan que es importante vivir juntos?...
»No estamos aconsejándole necesariamente que se quede en su nuevo país, sino más bien recomendándole que se quede junto con su esposo y que hagan sus planes futuros juntos, cualquiera que sea el país en que vivan.
»Honre a su esposo permaneciendo a su lado, tal como lo prometió cuando hizo sus votos nupciales. A usted se le hará mucho más fácil adaptarse al nuevo país si determina que la prioridad más importante de su vida es estar junto a él. Y verá que con el tiempo sus hijas seguirán su ejemplo, aprendiendo a su vez a adaptarse.
»Le deseamos la unidad familiar,
»Linda y Carlos Rey.»
El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se pulsa el enlace en www.conciencia.net que dice: «Caso de la semana», y luego el enlace que dice: «Caso 53».