Ganglios inflamados provocan cáncer
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 451,691 personas se diagnosticaron con un linfoma en el año 2012, a nivel global. En Panamá, se detectaron cerca de 180 casos ese mismo año. Es por eso que dicha institución manifiesta que para finales de este año existirán más de 209 nuevos casos.
Durante todo septiembre diferentes instituciones de salud se enfocarán en realizar actividades para crear conciencia en la población masculina, pues los linfomas atacan más a los hombres.
Dimas Quiel, oncólogo hematólogo, dio a conocer más detalles, las formas de prevención y tratamiento.
¿Qué son los linfomas?
Los linfomas son un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático del cuerpo, el cual forma parte del sistema inmunológico y ayuda al organismo a combatir enfermedades o infecciones. Surgen por el crecimiento desmedido de linfocitos (glóbulos blancos) anormales. Debido a que el tejido linfático se encuentra en todo el cuerpo, un linfoma puede aparecer en los ganglios linfáticos del cuello, a lo interno del tórax, pelvis y abdomen; en el estómago e intestinos, el bazo, la médula ósea, las adenoides y amígdalas, regiones inguinales y axilas.
¿Cuántos tipos de linfomas existen?
Actualmente hay dos categorías.
¿Cuáles son los factores de riesgo?
Edad: algunos pueden ocurrir en la edad adulta temprana (15 a 40 años) o después de los 55 años.
Deficiencias en el sistema inmunológico: personas que están infectados con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
Exposición a sustancias químicas: ciertos herbicidas y plaguicidas.
Enfermedades autoinmunes: padecer lupus, artritis reumatoide, soriasis o esprúe celíaco, entre otras.
Exposición a la radiación: haber recibido radioterapia para tratar otros cánceres.
¿Qué síntomas presenta el paciente?
Aumento constante y sin dolor del tamaño de los ganglios linfáticos en el cuello, la ingle y axilas.
Sensación de llenura después de comer una pequeña cantidad de alimento.
Presión en el pecho.
Dificultad para respirar o tos.
Fiebre sin razón aparente y sudoraciones nocturnas abundantes.
Agotamiento extremo.
Pérdida de peso inexplicable.
Una vez diagnosticado ¿cuál es el tratamiento?
Las opciones para tratar un linfoma dependen de diversos factores que el médico debe analizar primero: edad y condición general de salud del paciente.
Radioterapia
Quimioterapia
Inmunoterapia